miércoles, 29 de junio de 2016

Amanecer en estío (De mi humilde lira de rima libre)

  

Tras la cresta de aquel  monte

Padre sol  viene apuntando,

Con resplandores de fuego

Y  genio malhumorado.

¡Padre sol  ¿quién  te ha llamado
Tan temprano y tan airado?
Y  padre sol de mal genio
Nos responde: ¡ya es verano".

Que ya es verano nos dice
Y su deber es tostarnos,
Que ya vendrá el invierno
Que  nos  pondrá   tiritando.

Que  sin él en las eras
No  habría espigas con granos, 
ni el morero en el rulo
amodorrado   cantaría

temporeras somnolientas,
ni les diría  arre  que es tarde
a las colleras que trillan,
sobre la parva  en verano. 

Ni bajo la parra el labriego 
echaría una  siesta soñando
con cosechas abundantes 
que padre sol va  madurando

¡Qué misterio tan misterioso
Son el invierno y verano,
Señales  del Dios arcano
Que ahora  es la  moda  negarlo…!

domingo, 26 de junio de 2016

GOBIERNOS DE AHORA Y DE SIEMPRE


Lo dijo  Luís de Góngora, el clásico culterano
y, hasta ahora, nada ha variado ni a la vista del 
pajeado de hoy, cambiará:****
..............

A veces despoja
De choza y apero
Al mayor cabrero,
Y a quien se le antoja;
La cabra más coja
Pare dos cabritos.
Cuando pitos flautas,
cuando flautas pitos.

Porque en una aldea
Un pobre mancebo
Hurtó sólo un huevo,
Al sol bambolea,
Y otro se pasea
Con cien mil delitos.
Cuando pitos flautas,
cuando flautas pitos.

sábado, 25 de junio de 2016

MAGISTRAL ARTÍCULO DE GERARDO HERNÁNDEZ LES


Gerardo Hernandez Les, medico jubilado y siempre politólogo, que además  ha ejercido la política a pie de tajo a altos niveles en lo nacional, ha escrito hace pocos días un artículo  aparecido en plurales medios, incluidas las redes. Yo lo he recogido, y releído (mueve a reflexión), en el solvente periódico digital, “EL AGUIJÓN”.

Se trata de un  alegato definitivo en el que el autor analiza la actualidad política de España de forma magistral y, por ende, convincente e irreplicable; pone de manifiesto el articulista, cual es habitual en él,  una lealtad  a la verdad histórica, una solvencia intelectual y una integridad moral sin concesión   a prejuicio alguno, que lo sitúa en excepcional, en rara avis, en estos tiempos en los que nuestros políticos son (sin ninguna excepción porque todos contemporizan) meros “afanadores” y pícaros chichiriváinas  indigentes en  saberes, como sacados del patio de monipodio cervantino, que han convertido lo que debería ser el noble comercio de la política,  tal definió Aristóteles, en un mercado de mentiras capitalizadas  obscenamente; una especie de corrala sainetera.


Dicho artículo que el autor titula, “Crisis de la política, crisis de partidos”,  es tan exhaustivo a la vez que conciso que, para mi  humilde entender, pero luenga experiencia, se erige en estos momentos nefastos, y diríase que nefandos, en una pieza de obligada lectura para todos aquellos (as) a quienes les duela España y la sientan desinteresadamente. Mueve a reflexionar antes de depositar nuestro voto en las urnas. Léanlo.

viernes, 24 de junio de 2016

EL MAL FARIO DE JOAQUÍN, EL GITANO “ESQUILAOR”

          
         Como era costumbre,  aquella mañana temprano antes de bajar del pueblo al sombrajo de labor que mi padre tenía en la vega, me llegué al Bar  de Pepe Vargas, después y hoy, “El Lorito”, a tomarme un calibre de aguardiente de “El mono”, cosa que en aquel entonces era hábito matutino de las gentes del campo;  dos calibres me vareteaban, pero uno me elevaba el tono vital para encarar  las faenas del día. Y así hacía.
         En ello estaba, sentado en un velador, cuando veo que  entra al bar Joaquín,  el gitano,   ducho como todos los de su raza, en esquilar  bestias (burros, mulos y caballería), quien  de pie en el mostrador, farfulla con deje calé: Lorito, ponme un mitad  calentito  y bien “cargao”.  Tras Joaquín, se acercó también al mostrador a tomar su  café y copa, Monte, el guardia civil; venía  con  uniforme, incluido el  tricornio;  Joaquín,  lo miró de reojo, se le notó un cierto desasosiego y  el semblante  le empezó a palidecer ostensiblemente.
         Tirados de máquina  ambos cafés, el Lorito le dice al guardia civil: Ahí tienes tu café, Monte,  y, toma este otro y hazme el favor de arrimárselo  a Joaquín que,  a mí,  con las damajuanas que ahora  tengo aquí dentro me cuesta trabajo llegar a él. El civil le alargó con toda naturalidad el café  a Joaquín quien, sin decir esta boca es mía, sí  desparramó una  aviesa mirada sobre el  tabernero.
         Entonces, las relaciones  entre  gitanos y la guardia civil eran tan incompatibles como las de hurones y conejos. Monte despachó rápido el café y copa para salir pitando porque, según dijo,  entraba de servicio.
         Cerciorado Joaquín de que el civil estaba ya lejos, interpela con torcido gesto  al tabernero y le enjareta: “Loro, otra vez que te pida un café, si es que vuelvo algún día por aquí,  me lo pones tú, como dios ordena, y no me lo mandes con naide, y menos (¡qué le parezca a usté!), con un guardia civil con tricornio. Me has metío el mal fario pa to el día..¡Toma cóbrate, cóbrate, cóbrate…!” .  Y,  se las najó.
         Joaquín era, como todos los calé, supersticioso,  estaba en que  el “Loro” le había echado el “cenizo” con su ocurrencia,  pero tenía que buscar  trabajo como todos los días para dar algo de comer a su abundante prole; tiró hacia la vega por la salida de los “caños gordos” y, al llegar por el camino de Talento a la acequia, vio que al otro lado,  trabado sobre un careo de yerbajos había un borrico padre con gran pelambrera. Al cruzar por el puente de  la huerta de José “Pajarito”, vio a este  sentado a la sombra de  un albaricoque con un manojo de esparto bajo el sobaco haciendo una soga lazo de cinco ramales.
         --Buenos días José-
         --Hola Joaquín, ¿ a onde…?
         --Que he visto el burro y necesita  esquilarlo ¿a tí  te paece  bien?
         --Me da igua, jaz  lo que te parezca
         --Pue ahora mesmo meto mano a la obra
         Joaquín, cayó en la cuenta de que había sido injusto con “El Lorito” al acusarlo de meterle el bajío, pues no más salir del pueblo había encontrado  faena;  se esmeró  para agradar a su amigo e  hizo sobre  el burro una verdadera obra  de arte; cuando terminó se fue en busca de José “Pajarito” quien, falto de sueño por la guarda nocturna del melonar del otro huerto,  se había quedado  dormido como un lirón.
         Joaquín  zarandeó un poco a “Pajarito” que despertó un tanto malhumorado-
         --¡Joaquín, coño, que quieres ahora…!
         --Que he terminado de esquilar el borrico y vengo a que lo veas y me pagues, son dos duros,  por tratarse de ti, yo cobro más…
         --Pero hombre… si el burro no es  mío, es de uno de los jornaleros de aquella cuadrilla que está binando papas en el cañamillo de Frasquito Talento…
         --Pero tú  me dijiste que lo pelara
         --No, tú me dijiste que lo ibas esquilar y si a mi me parecía bien, y yo te contesté que sí, pero el burro ¡¡¡no es mío, Joaquín!!!
-- ¡¡Ay, la leche que mamó el “Loro”, será posible  el mal sino en que ma metio el papagayo ese… Hoy ya ni toco la tijera, me vuervo a mi casa y  ma cuesto…

Dicen que Joaquín ya nunca más volvió por el Bar “El Lorito”.

jueves, 23 de junio de 2016

LOS PÁJAROS Y LOS NIÑOS DE LA GUERRA


                               
            En los ocasos estivales, aquel ruiseñor prodigaba su nostálgica melodía velado por el cendal  que tejían las  trémulas hojas   del álamo de  los quijeros  de la agarena acequia del Barullo.
         En otra estación la oropéndola de cuerpo amarillo y alas negruzcas, era la que lanzaba su  melopea: tiri-aliuuu  cuando la luna llena.
         Igual que Dios, el chopo de la acequia debía amar  mucho a  los  pájaros cantores que endulzaban con sus cantos  los atardeceres con candilazos rojos el alma sensible de  los campesinos  niños pobres que son poetas.
         En el enorme álamo blanco del camino saltaba de rama en rama el diminuto pajarito chamarín  del agua al que las tardes con nubes negras los niños le preguntaban: “Pajarito del agua, ¿lloverá?”…
         En su inefable pipiá el pajarito modulaba un dulce canto que lo interpretábamos como su respuesta: “¡Si señor, si señor, sí señoooooor! ¡Qué inocentes eran entonces los niños poetas de los campos de la ribera!

         Y vino una guerra, y  los ojos de aquellos niños vieron cosas terribles…y, les llamaron, en vez de niños poetas, “niños de la guerra

“¡PA CANTIÑAS VOY YO..!”

      
         Una esplendente mañana estival, con el  sol todavía  amortiguada  su insolencia por las frescas brumas de la aurora aún casi escondida tras los montes,  un  enorme galgo de letales instintos cinegéticos, de negros designios  como la  parca,  perseguía cada vez más cerca de su jopo a una liebre  que intentaba escapar  de la muerte con velocidad de vértigo a media ladera y a favor del viento hacia un melozal de alta hojarasca, no muy lejano, en donde poder escabullirse para  librarse del  lebrel.

         En esas iba el lebrato, pues macho era,  cuando una canora alondra   suspendida del cielo sobre el otero con imperceptible y grácil tremular de sus alas,  ofrecía al gran Dios la matinal y dulce jaculatoria   de cada día. Qué  nacido y criado en el campo no ha visto alguna vez  una alondra levitando en el cielo, y desgranando su particular padrenuestro con arpegios estremecidos, al tiempo que la abubilla  zascandilea en  el polvo del camino ó, la alzacola salta de rama en los cercanos granados que orillan la realenga mientras los platillos de la carreta acompañan la temporera que a su yunta le canta el carretero, al tiempo que los perros van  mitigando ya sus ladrares  de la medrosa noche  a lo largo del río... ¡memento!    

         Pero eso solo no  es la vida.  A la alondra, exultante de misticismo panteísta, no se le ocurrió otra cosa que interpelar a la liebre durante  su desenfrenada carrera de esta guisa: “¡Oh hermana liebre, aminora tu loca carrera y repara en las inspiradas invocaciones que mi canora garganta eleva al Creador de tantas maravillas que compartimos en la tierra mirando a los insondables cielos. Ceja en tu desaforado correr y escúchame, que  las prisas irreflexivas  conducen a la perdición...”  

         En una de las maniquetas que al socaire de una coscoja hizo la liebre para alejarse un tanto del inmisericorde galgo, mirando de soslayo a la beata avecilla le endilgó: “¡Malnacida, pa cantiñas voy yo...!  Más valdría, y agradaría a Dios,  que te tires en picado desde ese altar lírico sobre el lomo del malvado lebrel, le picotees el rabo y la rabadilla para distraerlo y así yo escapar de la muerte a que me lleva sentenciada sin apelación posible”.


         No tiro de moraleja: Sáquenla de su propio caletre políticos robapanes y panza afrecho que distorsionan la dignidad de la política y los beatos sin valentía para defender su fe con acciones coherentes. 

LA MUERTE DEL PERRO RABIOSO

              

           Un alboroto de lastimeros aullidos contrapunteó el casto  silencio de la noche estrellada.  Se despertó un clamoroso sonar  de caracolas. El boyero, que dormitaba haciendo hora  para  pasturar el ganado en la pesebrera, se alarmó, libró el balate de la era contigua y nos despertó a los mozos y labriegos  mayores que dormíamos  sobre la paja de la parva.  “¡Lenvataos, algo pasa...!:   ladrones,  o   el perro con rabia...”

           Sonó un tiro de escopeta cabe las baldas  de la Alhóndiga. Callaron los perros y enmudecieron las caracolas centinelas. Los gallos iniciaron su plática de  encrespados kikirikis  desde los tapiales de los cortijos de la ribera.


           Aquella mañana, los madrugadores labriegos  se toparon con el enorme perro muerto bajo la  higuera del borde del camino cabe el atraque de la  mimbre. Sus rasgos eran ya de paz infinita; no mostraban  el enorme martirio que en vida sufren  los perros hidrófobos. Sólo la muerte era entonces la solución  para suprimir el horrendo sufrimiento de esta enfermedad. Cruel paradoja de la vida y la muerte.

SURCOS Y PÁJAROS (Vivencias de un niño cortijero)

        
Lento el arado tras la premiosa yunta abre surcos  paralelos en la besana abierta  sobre la tibia  tierra con tempero. El niño cortijero, sigue los pasos del gañán amigo que, con una mano en la mancera y en la otra la ahijada,  modula el  abandolado  cante de la arada:  
                       Arando en un peñascal
                        Se levantó la perdiz
                        Y en lo alto de un majano
                        Se puso a piñonear
                                       ***
                    ¿Por qué aran las vacas
                        Tan despacito?
                    Es que el gañán les canta
                    Quedo, quedito...
                                        ***
                         “Esquilones de plata
                           Llevan los bueyes...” (G. Lorca, popular)
         ¿Sabe el paciente gañán que es instrumento de la Gracia panteísta...? En su cantar lo de menos son  las letras, siempre simples y elementales; lo importante es el sonsonete lento y acariciante  que sosiega el  alma de los bueyes en su duro trajín.
         Pero al niño alhondiguero lo que le despertaba amor y curiosidad  era la miriada de pajarillos que cubrían revoloteando a ras de tierra, en toda su longitud, el surco  abierto,   buscando en él  los insectos que son su pitanza:  orovivos, aluas, lombrices, hormigas cochineras y cabezonas, grillos, y un sin fin de  bestezuelas que la vertedera del arado chirivito iba volteando de  sus habitáculos  subterráneos.
          El zagalillo, de poco  más de cinco años, sabía ya el nombre de todas aquellas creaturas aladas. Pipitas, tontitos, chamarines, trigueros, cogujadas, alondras,  mosquitos y, sobre todo,  llamaba su atención los reyneros blancos tamaño gaviotas que iban y venían por la besana cazando insectos sobre el lomo de los bueyes yunteros.

         Una vez, como juguete, el morero  le llevó del pueblo al niño cortijero  una “costilla”-trampa  de alambre acerada con muelles letales para cazar pajarillos; como señuelo, se le ponía en un mecanismo ad hoc  un gusanillo,  después se embozaba un tanto en la movida y blanda tierra del surco. Cuando el pajarillo “picaba” el  señuelo, la costilla saltaba inexorablemente mortal,  aprisionando  el cuello de la avecilla que moría ahorcada.   Un día, el zagal vio la agonía de una grácil  “pipita” que había “picado”  y tenía su  cuello gris casi partido; el niño lloró amargamente  su culpa  y ya jamás volvió a poner trampas.

CARTAMA CUNA DE ILUSTRES MALAGUEÑOS


IMPRESIONANTE CARTA DE LUIS DE OTEYZA AL GUADALHORZANO GENIAL, JOSÉ GONZÁLEZ MARÍN (A mi querido amigo de Caracas, D. Rafael Dupuoy

Epistolario  de  OTEYZA

                Sr. D. José  González Marín

             San Juan de Puerto Rico

                Querido y admirado amigo:
                Me informo de que usted, prosiguiendo la jira artística, que, con el éxito de siempre, realiza en la actualidad   por esta parte de América, se propone venir a la Habana. Y  me apresuro a escribirle, rogándole que persevere  en su propósito, y hasta que lo realice  inmediatamente, incluso cancelando otros contratos, caso que preciso fuese para ello. Todavía, si en vez de un barco puede tomar un avión que abrevie el viaje, no deje de hacerlo, se lo suplico.
                ¿He de decirle  a que obedece esta prisa mía por oír sus recitales?...Sí; he de decírselo pues puede ser que lo juzgue debida sólo a mi constante afición hacia el género de su trabajo   y a cuanto aprecio la manera como usted la realiza. No habrá olvidado aquella travesía de Nueva York  a Vigo, que hicimos juntos en el “Cristóbal Colón” y que hube de pasarme entera obligándole a recitar versos y versos. “¡Cuánto le gusta a usted la poesía!”, llegó a decirme.. Y yo le respondí: “Me gusta la Poesía y me gusta como recita usted”. Así era entonces, pero ahora es más, mucho más.
                Su voz, recitador ilustre, da lo mejor del alma española, que usted exquisito temperamento, selecciona de la obra de nuestros poetas. Resulta por ello usted España hecha verbo, la España grande, la España noble, España pura… Y esa España honda en sentimiento y  elevada de expresión sublime  por el fondo y magnífica  respecto a la forma, es de la que siempre me enorgulleció y es de la que ahora dudo hasta de que haya existido. Necesito así, que usted, trayéndome los ecos de esa España, disipe la duda que me atormenta.
                Otras voces llegan de España…Voces empañadas de amargura, roncas de ira, temblorosas de miedo, estridentes de indignación, que refieren escenas terroríficas y  actos vergonzosos. Oyendo esas voces, que son gemidos y denuestos, quisiérase ensordecer, para olvidarse de algo horrorizante y abochornante; de aquello, precisamente,  que el Duque de Rivas, en su soberbio romance “ El castellano leal” , hizo decir al Conde de Benavente, como motivo de satisfacción suprema y de legítimo orgullo: “haber nacido español”
                Venga su voz, pues, recitador ilustre de temperamento exquisito, trayendo el reflejo poético del alma española, como prueba viva de que España fue grande, fue noble, fue pura…Venga su voz a hacer escuchar que España tuvo profundos sentimientos y elevadas formas de expresarlos. Venga su voz a cubrir esas otras voces que de España llegan gimientes e imprecantes.
                Usted, que resulta ser  España hecha verbo, venga a demostrarnos  que un día existió aquella España, y  darnos, con esa seguridad, la esperanza  de que aquella España vuelva a existir otro día, aunque en los días presentes este siendo teatro de escenas terroríficas y actos vergonzosos.
                Es más, mucho más, muchísimo más, según acabo de decirle, que mi constante  afición hacia el género de su trabajo y que cuanto aprecio la manera como usted lo realiza, esto que me mueve a apremiarle, del modo que lo hago, para que venga  lo antes posible y me deje escuchar en seguida su voz.
                Rogándole, suplicándole, implorándole  que me atienda, me repito suyo amigo que le admira y le quiere.
E, s, m.
                                             Luís de Oteyza.

                                        La Habana 8 enero de 1.937

                                                                                                ***
El recorte periodístico del diario en que fue publicada esta  carta abierta, obra en el archivo de Francisco Baquero Luque obtenido en hemerotecas.

                                                    *****
LUÍS DE OTEYZA, (Zafra (Badajoz) 1.883- Caracas (Venezuela) 1.961) fue un poeta intimista adscrito al Modernismo español. Escribió su obra poética en su juventud. Nacido en España, murió en Caracas (Venezuela)
Practicó un periodismo combativo que le hizo famoso y polémico. En 1904, pasó a dirigir Madrid Cómico. Colaboró en numerosas publicaciones periódicas, El GloboLa Nación,MadridEl LiberalHeraldo de Madrid.
Primer director del periódico La Libertad, fundado en 1919. Con él colaboraron Antonio de LezamaAntonio ZozayaEduardo Ortega y GassetLuis de ZuluetaAugusto Barcia,Pedro de RépideManuel Machado y Luis Salado entre otros.1
Enviado por su periódico a Marruecos para entrevistarse con Abd el-Krim publicó su famoso artículo “Caudillo del Rif”, el 8 de agosto de 1922
Pionero de la radiodifusión en España, fue presidente de la Asociación de Radioaficionados de España (ARE) y fundó una de las primeras emisoras de radio que emitieron enMadrid. Fue en 1921, cuando dirigía el periódico, cuando fundó , Radio Libertad.2
Republicano de izquierdas, anticlerical, hizo propaganda por la proclamación de la República española. En 1933 fue nombrado embajador en Caracas.
Al estallar la Guerra Civil española, se exilió.
Viajero incansable, escribió numerosas novelas de aventuras, ambientadas en los lugares exóticos que había visitado, muy populares en los años veinte y treinta

miércoles, 22 de junio de 2016

ESPAÑA:¡VAYA PLAN!


El artículo que sigue lo publiqué el día 12 de junio de 2.004, ¡¡hace 12 años!! (el mismo año que se creó la Plataforma Pro Hospital del Guadalhorce y que en 2.005 Zapatero y Chaves y segundos de  abordo  prometieron en Álora que el Hospital guadalhorzano entraría en funcionamiento en 2.008, y miren ustedes por donde vamos) en la formidable revista  que editaba la Asociación de empresarios Guadalpime. Vean ustedes si, anécdota aparte, no es lo mismo que sucede hoy, pero aumentado

1.812, BATALLA DE CÁRTAMA CONTRA LOS FRANCESES (Enjundia de nuestra historia)


He aquí unos apuntes sucintos de esta batalla tomados de mi libro, “Cártama en su historia. El Juglar y la Virgen Peregrina”

Elementos históricos y de tradición oral totalmente verosímiles, se mezclan en las noticias sobre la gran batalla que en los aledaños, y en el propio casco urbano, de Cártama, tuvo lugar como colofón de la mantenida y esforzada lucha del pueblo liso y llano cartameño contra los invasores franceses, el día 16 de febrero de 1.812. Esta batalla, por ser la penúltima (unos meses anteriores a la de Arapiles, que fue la última en la guerra de la independencia), librada entre españoles y franceses antes de éstos abandonar, derrotados, territorio español, es de una gran importancia que enlaza, como tantos otros hitos, la Historia de Cártama con la general de España y Europa. Hasta en el Arco del Triunfo que erigiera Napoleón en París para celebrar sus victorias, tuvo el cinismo de anotar la de Cártama como una de ellas, cuando fue todo lo contrario. También incluye como gesta victoriosa de sus ejércitos, la Batalla de Bailén. Así se escribió siempre, y hoy, la historia.

No es de este momento entrar muy de lleno en esta efeméride. Nos limitamos a recordarla con unos someros datos: Desde 1.810, Cártama estaba bajo el dominio napoleónico, cuyas huestes, entraron en España en 1.802 y se dio lugar a los de todo el mundo conocidos episodios del 2 de mayo, cuando el pueblo español se levantó en armas contra el invasor francés.

El pueblo de Cártama, y en especial, curiosamente, sus mujeres, no fueron menos aguerridas. En todas, había calado el espíritu de la célebre heroína, Agustina de Aragón. A los soldados gabachos les encantaron desde el primer instante la galanura, donaire y frescura de las mozas cartameñas, a las que de continuo les tiraban los tejos. A ellas les hervía la sangre, no de embeleso, sino de rencor hacia el invasor que tenía sojuzgada a su patria y a su pueblo: Simulando con miradas y mohines pícaros que se avenían a los requerimientos del franchute de turno, éste como gato en enero que ventea gata propicia, entraba tras ella en la casa. Y, ¡zas!, el padre y hermanos de la guapa hembra, de un hachazo daban cuenta del iluso guerrero galo, cuyo cuerpo enterraban en la corraleta del corral, en donde siempre se tenía un hoyo abierto para “echar los desperdicios”, que una vez “ocupado” enterraban con la tierra sacada del mismo, le rociaban estiércol por encima para borrar fóllegas y, si te vi no me acuerdo, franchute. Los mandos, ilusos ellos, se lamentaban de la gran cantidad de soldados que desertaban desde Cártama por sus sierras. El poeta cantó:

…Y cuando en la hispana tierra
pasos extraños se oyeron,
hasta las tumbas se abrieron
gritando “¡venganza y guerra!”
La Virgen, con patrio ardor,
ansiosa salta del lecho…


Así peleó el pueblo cartameño contra el altanero intruso desde, como he dicho, 1.810. Y, fue el día 16 de febrero de 1.812, cuando el General Gobernador francés de Málaga, Marasain, parte desde la capital para Cártama al tener noticias del que el General guerrillero español, Ballesteros, se disponía a pasar por esta villa camino de Málaga para tomar esta plaza. Marasain envió mensajes al general, Nei, que andaba por Alora, para que acudiera a darle, uniendo ambos ejércitos, la batalla a Ballesteros; pero aquél no acudió por razones que en otro lugar se explican. Ambos ejércitos se enfrentan irremediablemente en el perímetro comprendido entre El cerrajón, El Monte del Calvario y la carretera de Coín. El General Ballesteros al mando del 4º ejército y, Marasain, de un ejército de 2.000 infantes y 400 caballos, más artillería. Cayó herido Marasain y se refugió en el casco urbano de Cártama, pero el ambiente hostil le hizo emprender una retirada hasta el Puente del Rey en el Guadalhorce, con la intención de tenderle allí una emboscada a Ballesteros en la que éste, avezado a la guerra de guerrillas, no cayó. Tras esta derrota, Marasain, emprende la retirada de Málaga camino de Franc
ia. 

ERAN OTROS TIEMPOS...




Eran aún esos tiempos en los que uno era capaz de montar y galopar sobre lo que se terciara..."juventud divino tesoro/ te fuiste para no volver,/cuando quiero llorar no lloro/ y a veces  lloro sin querer..." (R. Darío)

martes, 21 de junio de 2016

El 29 DE JULIO 36 ESTABA YA LA VIRGEN CON GONZÁLEZ MARÍN EN BUENOS AIRES



Asì interpretó mi entrañable amigo, Rafael  Inglada (poeta, historiador, genial dibujante y quien más sabe de Picasso) cómo González Marín presentaba desde el escenario la Imágen de la Virgen por América y anunciaba el Convento en cuya capilla podía  América rendirle culto a la Virgen de la Madre Patria.  La  Patrona de Cártama, Ntra. Sra. de los Remedios ha sido la única advocación e imagen que le han rezado gente del mundo entero emigrados en aquellas repúblicas hermanas (españoles allí residentes durante generaciones, italianos, ingleses, rusos, etc.etc) mestizos de españoles e indios como también indios integrados ( Guaraníes  en Paraguay y Uruguay;  Aymara, Quechua en  Bolivia; Quiché (maya),Kaktchiquel, Kekchi y Man en Guatemala;Quechua y  Aymara en Perú y Ecuador; Quechua en Argentina;Mapuche en Chile; Guajiro en Colombia; Caub en Honduras, Miskito en Nicaragua; Warao en Venezuela y otros que a cuya concreción no me ayuda ya la memoria.

Este año se cumple el 80 aniversario de esta gesta mariana única en la historia de la humanidad toda y, del hermanamiento de aquellas repúblicas de allende el océano  con  la  España en guerra sin que hubiera distinción de bandos, y ello, a través de la Patrona de un pueblecito español, Cártama. En testimonio de ello, cada presidente de aquellas naciones le entregaron  a la Virgen una bandera de sus respectivos  países que colgaron hasta la década de los sesenta  de los muros de su  Santuario serrano.

Con sólo este  grandioso hito es para que los cartameños nativos y los foráneos que en ella se han asentado estuviéramos  henchidos  de legítimo orgullo pero...¡¡quiá!!. Menos que otros pueblos comarcanos de los que fue hijo adoptivo el genial y preclaro benefactor cartameño sí le están rindiendo constante homenaje. Me da infinita pena oír a algunos residentes de no desdeñable altura intelectual decir "yo no quiero saber de Cártama". Pues en ningún otro sitio  es fácil dar con un pueblo que tenga la riqueza intrínseca  y potencial, así como una historia tan enjundiosa como Cártama. 

Señoritas devotas que hicieron de cicerone sobre la Historia de la Patrona de Cártama con González Marín en el Convento de Buenos Aires en donde fue la Virgen de los Remedios depositada y expuesta al culto al arribar  a America por  Argentina.

RECONOCIMIENTO ESPECIAL: Como cartameño, tengo en mis entretelas un enorme agradecimiento al pueblo de Alhaurín el Grande del que el rapsoda era hijo adoptivo, y en donde tantos amigos tuvo siempre en vida hasta crear la "Peña Pepe González Marín".  Y ese mismo afecto le ha demostrado en reiteradas ocasiones recientemente, con actos culturales cara al público que siempre ha respondido consciente del valer artístico y humano de su preclaro hijo adoptivo, como también lo fue de Coín, Alora, Ronda, Málaga y otros. 
Alhaurín el Grande ha contribuido a recuperar de forma ya indeleble la memoria  de un genial comarcano que llevó dándole pre y pátina, a su comarca guadalhorzana por todo el mundo de habla hispana. En Alhaurín el Grande, Pepe González Marín  tuvo su primera actuación cuando decidió recuperar para el pueblo la poesía escenificada; ningún ideólogo hizo tanto por la cultura popular. Y, con el pueblo, su Ayuntamiento empezando por su alcalde entonces, Juan Martín, Toñi Ledesma, conceja de cultura, María Rosa González, Jesus Rueda Solano, Macarena,  y amigos cofrades como Salvador Pérez Etc,etc:  Cada día de Padre Jesús,  desde el sitial que el buen Dios lo haya colocado, recitará estremecido "La Pèdrada" de gabriel y Galán, como tantas veces hizo en vida ante   Jesus Nazareno de Alhaurín.





ESTOY TENTADO A HABLAR


            No abundamos ya  quienes por edad fuimos testigos (“niños de la guerra”) sufrientes de una   república por todos anhelada que llegó en abril de 1.931; pero el día 20 de mayo del mismo año, al mes de implantada,  ya  se autocondenó a un trágico fracaso con la quema masiva de bibliotecas, iglesias, conventos  y persecución feroz de las libertades, incluida la práctica de creencia  religiosa  y la  persecución  de la libertad de expresión, hasta el extremo de que  intelectuales y artistas que avalaron y propiciaron su advenimiento (Ortega y Gasset, Marañón, Pérez de Ayala. Azorín, Pío Baroja, José González Marín y otros preclaros  personajes de las letras y el arte), se vieron muy pronto obligados  a exclamar doloridos: “No era esto, no era esto…”;  no era aquello lo que habían deseado y avalado con su prestigio   para hacer una España nueva más justa, tolerante, culta  y progresista.
            Si alguien quiere saber  a través del imparcial testimonio de un diplomático y hombre de empresa norteamericano, Edwar Norton, nada sospechoso de prejuicios ideológicos  ni de  parcialidad política afincado en Málaga durante el periodo que ésta estuvo dominada por el Frente Popular,   le recomiendo lea (si sabe hacerlo)  su libro publicado en Norteamérica y después en España, “Muerte en Málaga”.  Leyendo este libro no sólo se conoce de una manera fidedigna y detallada lo que pasó en Málaga capital, sino también en todos los pueblos de su provincia y de España, durante el periodo que estuvieron bajo el gobierno autollamado  “rojo”.
            Como un dato elocuente del ambiente que se respiraba en la II República, en la  Introducción que hace en dicho libro el  ilustre académico de la Real Academia de San  Telmo, José Manuel Cabra de Luna, transcribe las siguientes palabras  de la entonces  Diputada  Margarita Nelken: “  Exigimos la revolución. Pero una revolución del tipo ruso no nos puede servir de ejemplo porque en España, llamas gigantes deben alzarse para ilumninar el planeta y olas de sangra deben teñir de rojo los mares”…
            Y el mismo señor Cabra de Luna  dice del autor  del libro, Edward Norton, director de la gran empresa de exportaciones, Bevan: “Muerte en Málaga no es una obra de análisis político. Es  un relato fruto de la reelaboración de un diario tenazmente mantenido durante todo el tiempo en que tuvieron lugar los sucesos que se narran…” “ El gran valor de la obra de Edward Norton  es el de que él estaba allí.  No se trata de un testigo de referencia, ni se trata de un protagonista de los hechos a los que necesariamente conota de su propia carga emotica y de la perspectiva de su mirar. Es el valioso testimonio de quien, sin pertenecer a esa sociedad, decide libremente quedarse en ella en una circunstancia de crisis total; es la memoria de un hombre libre…(ante el horror que estaba presenciando),  tras afirmar no tener ninguna veleidad fascista, anhela que las tropas  del general Franco tomen Málaga para imponer orden, para concluir con aquella situación caótica que describe…”

            Confieso que para  mi poco nuevo contiene este libro, dado que todo lo que sustancia lo viví y presencié en Cártama y, aún más, porque fui víctima de ello  con una intensidad que  quedó indeleblemente en mi memoria como en la todos  los niños que presenciamos aquel horror  que, algunos están  jugando temerariamente a repetirlo, motivo ello de que yo, contraviniendo  mi norma de callar al respecto, esté ahora, a la vista de la imprudencia  de algunas posturas y provocaciones políticas, TENTADO A HABLAR.
 
            Málaga y Cártama son teselas del gran mosaico que conforma nuestra piel de toro geográfica y, obviamente, lo que pasó en ellas  en aque aciago periodo hustórico, fue lo que pasó en todos y cada uno de  todos los pueblos y ciudades de España.

            En virtud, pues, de la recalcitrante cadena de fabulaciones históricas  que sobre dicho periodo  se vierten  temerariamente hoy,  la TENTACIÓN A  HABLAR es casi iurreprimible y, en justa y verídica reciprocidad,  llamar, tal  aconsejaba el  sabio benedictino Feijoo,  a los que  mienten, embusteros, a los que roban, ladrones y, a los que siembran el odio guerracivilista, asesinos. ¡¡¡Asesinos…!!!

viernes, 17 de junio de 2016

                     EL INDIANO Y LA  POLÍTICA DE SU PUEBLO
                    (Incluido en mi nuevo libro, “Ecos de la Alhóndiga”)

            Circula aún una especie de chascarrillo cateto, que en el fondo contiene  un sentido de fabulilla con elocuente moraleja aplicable a algunos políticos (as):
            Un labriego plantó  en su huerta un albaricoque  que, ya adulto, resultó saraza, es decir,  no daba frutos; todo el flujo de sabia lo  utilizaba para echar fronda. Desesperado el labriego por la ruina  de la agricultura, decidió emigrar a América pero, previamente   cortó el albaricoque a rapaterrón; empleó, antes de irse, las ramas secundarias para alimentar un tiempo el fuego de su humero pero, no así el grueso tronco que, al marchar,  quedó tirado en un lindazo de su huerta.
            Sucedió que estando el campesino en las Américas, en una trifulca política fue quemada la imagen del patrón de su pueblo. Los parroquianos, pasados los momentos álgidos de  la revolución, decidieron  encargar una nueva imagen del patrono para renovar la tradición religiosa. La condición que les puso el imaginero era que ellos deberían aportar la madera. Daban vueltas a sus respectivos magines buscando un tronco adecuado. Uno de ellos, sugirió que se utilizara el tronco del albaricoque que, el  indiano paisano, había dejado en su huerta. Y eso hicieron: El escultor tornó el tronco en una magnífica imagen.  
            Cuando el huertano  volvió a su pueblo, ya bastante adinerado, acudió  a los renovados  actos litúrgico en honor del patrón. No más entrar al templo, lógicamente se fue a rezarle al titular, ignorando que la talla  antigua había sido quemada y reconstruida de la forma dicha.
            En cuanto el retornado le echó la vista encima al santo, se dio cuenta que, por lo que fuera, la madera de la imagen era la del tronco del albaricoque saraza que él dejó  en el huerto al emigrar. Entonces su  oración fue de esta guisa:
            “En mi huerto te crié, de tus frutos  no comí, los milagros que hagas tú, que me los cuelguen aquí”,  (cogiéndose  en tal instante en gesto sugerente sus distintivos).
            MORALEJA: Antaño me vino  a las mientes este moralizante chascarro, al leer en la prensa que la entonces  Diputada cartameña del PP intervenía  con voz y mando  en una iniciativa en relación a la promoción de la aceituna “aloreña” en los mercados receptores, con denominación de origen, lo cual, era una más que plausible iniciativa pero, que yo, que conozco bien el currículum de la diputada siendo alcaldesa de Cártama (Parque Agroalimentario y lo que le cuelga morena: derribo de la emblemática Ermita de Casapalma, dejó marchar a otr4o municipio la implantación de una fábrica extrusión de aluminio con garantía de crear 200 puestos de trabajo para en los terrenos elegidos idóneos para ello y apalabrados dar un pelotazo urbanístico entonces tramite de diario acontecer, etc.etc.etc) no apuesto un penique de vellón por la buena praxis de los proyectos de creación de riqueza y puestos de trabajo de nuestros políticos cuya baja intensidad  de luces estaba entonces  vista y comprobada.  

            En virtud de ello, por lo bajini  no pude entonces  por menos que musitar la misma oración gramatical que el indiano de ma            Ahora tenemos en Diputación otra despampanante diputada de este lugar.  Esperemos que cambie el pajeao; falta le hace a Cártama.

JAMÁS EN LA HISTORIA HAN MENTIDO LOS POLÍTICOS ESPAÑOLES CON TANTA CRUELDAD COMO AHORA

Ya no es sólo la izquierda y la extrema izquierda populista radical y demagógica la que basa sus tácticas políticas  en la mentira pertinaz  y contumaz con  lo que tal vicio de la mente y del alma tiene de cruel hacia los receptores  de tan obscena práctica y, no digamos ya para el conjunto del pueblo al que dicen estos indigentes éticos representar. Es de bochorno.

El pasado debate a cuatro (o cobardemente de tres contra uno) celebrado hace unos días, a nadie iba a extrañar que Pedro Sanchez y Pablo Iglesias  pusieran en práctica una  impúdica y simplista batería de mentiras flagrantes y, ello, porque no tienen otro argumento de gobierno que el mentir compulsivamente acusando a un tercero de sus propios vicios y deficiencias ostensibles. No, en estos sujetos de marras eso no iba a extrañar a nadie.

Lo sorpresivo fue  que el tal Albert Rivera se alineara con los mentados tales con afán de superarlos en inquina solapada y en atrevimiento antidemocrático, usando datos falsos y torticeros en apoyo de sus capitalizados argumentos, propios de la frivolidad y desparpajo irresponsable  de Jaimito. ¡¡¡Vaya, vaya, vaya la que le ha caído a España y a los españoles decentes con esta chusma!!!. El colmo de su bajura y endeblez democrática  la ha ratificado y  evidenciado de forma inequívoca este señorito Rivera hoy mismo con sendas declaraciones   cuya sustanciación es una injerencia imperativa a otro partido, exigiendo  que defenestre al Presidente del mismo porque a dicho Rivera  le da la gana, aún teniendo  de la mitad  de votos y escaños  que el adversario cuya cabeza exige al propio partido de éste. Jamás en la historia de ninguna democracia se ha visto estulticia más antidemocrática.  Este señor nos ha resultado (¡¡quien lo iba a barruntar!!) un chiquilindongui  necio e ido a todas luces.  Esto, aunque últimamente me he propuesto hablar poco de política, merece una más amplia parrafada. Es inaudito a lo que están llegando estos macanditos que en vez de tratar de solucionar los graves problemas que tiene España,  se han enfangado en la corrala hasta volcar la pileta. Ni con mascarilla puesta votaba yo a Ciudadanos, pues si mala espina da en Andalucía su correligionario Marín, peor se está destapando su  pijo y voltario jefe. ¿pero cómo se le ocurre a este señor acusar de corrupción a nadie si su partido está  contemporizando y andando de perfil ante  la mayor corrupción gubernamental de la   historia universal. ¡¡¡Venga ya, don Alberto Rivera, un poco más de vergüenza torera y coherencia!!! 


PIROPO A LA VIRGEN


                       
                               Reyes y pastores gritaron:
                               ¡Doncella!...
                               ¡Madre!...
                               ¡Virgen!...
                        Maravilla divina en la que creemos
                        Sin haber conseguido resolver el dilema:
                        “Yo te hago luz de naciones”

                        A Ti Remediadora,
                        Un día te salvó el poeta,
                        Y te restauró esta  Ermita
                Que  había sido quemada;
                        Y  te compró  este  trono de plata
                        Verso  a verso, metáfora a metáfora.
                        Y  te han nombrado alcaldesa perpetua
                        A Ti Madre eterna,  pero se olvida  Tu  gesta
                        Hace ahora ochenta años
                               Hermanado las hijas de allende los mares
                               Con su madre de sangre la  España de siempre.

                        En un establo sin heno
                        Oliendo a niño nacido,
                Sin semilla de esposo,
                Sin espasmos de Madre
                Pariste al Dios  hecho Hombre.
                Lágrimas de asombro
                En los ojos del buey y del asno
                Presintiendo el Calvario.

               Para encontrar su destino
               El Dios hecho Hombre
               Emborrachó a los pueblos
               Con su Luz de  milagros.                   
               Y nosotros los hombres,
                Los dioses de barro, engolados,
               Seguimos escupiendo
               Al Dios  que pariste
               En pobreza de  establo.
               y en cada aborto seguimos matando
               Como Hitleres de hogaño,
               A niños Dios nonatos
               Que son seres humanos