SOBRE
LA DATA DE LA VIRGEN DE LOS REMEDIOS
Ignoro
cual habrá sido el dictamen de los
escultores sevillanos al tener en
sus manos para ser restaurada la imagen de nuestra Patrona la Santísima Virgen de los Remedios.
Yo,
varias veces he tenido ocasión de oir el dictamen en ese sentido ---y así lo tengo plasmado en
tres de mis libros (“El Juglar y la
Virgen Peregrina”, en mi sección de, “El faraón de los decires” y en “mi
biografía de la Madre De Jesucristo, “MARIA de Nazaret”)--- de la Egregia familia
de escultores, Palma (Paco Palma, padre, y sus tres hijos Francisco, Rafael y
mi fraternal amigo, q.e.p.d, José María) y, en otra ocasión nada menos que de Santiago Rusiñol que estuvo analizándola
esculturalmente en la Ermita (de la que hoy es okupa), y otros. Todos por
separado en tiempo y espacio, concluyeron coincidentemente en que es una talla del siglo XV, realizada en el taller de esculturas que tenía en
Sevilla la Reina Isabella Católica para suministrar Patronas y titulares a todos los pueblos que los
ejércitos iban recuperando de la invasión abindarrábica y jarifeña que, al
parecer añoran en exceso patológico algunos. Qué le vamos a hacer; el nuestro
es el país de entre otras “virtudes”, las paradojas y las pamplinas.