Los Servicios Operativos del Ayuntamiento de Cártama al hacer irresponsablemente una cata en medio de la calle sobre la cañería del agua a alta presión, les estalló la cañería que dejaba salir calle abajo un aluvión de agua y barro, sin que los operarios y el concejal del ramo presente se preocuparan de avisar a los vecinos que subían la calle del peligro que corrían. Una mujer a la que le cogió la avalancha cayo derribaba al suelo con una gravísima lesión del pie cuyas secuelas fueron para toda su vida.
Al Ayuntamiento, obviamente correspondía dar parte a su seguro, y, en su defecto, pagar daños y perjuicios ocasionados lo cual eludió hacer por venganza innoble la entonces concejala LEONOR GARCÍA AGUA del PP firmando el edicto que aparece arriba cargado de inventivas legales.
La próxima entrega será copia de un acta de pleno en la que la totalidad de los concejales ponen en evidencia a la ya entonces alcaldesa, LEONOR GARCÍA, que antepuso su rencor al esposo de la víctima porque escribía en prensa y, ella, cacique, no quería "democráticamente" que nadie le acusara sus flagrantes contradicciones como mandataria que no son de este momento desgranar.
Para Leonor es más socorrida la letra de la ley que el deber natural y el sentido humanitario.