Era un encanto ver
a la abubilla muñona
por los caminos labriegos
siguiendo carretas y bestias
escuchando al carretero
cantar una caminera
al son de los platillos de su carreta.
cantar una caminera
al son de los platillos de su carreta.
Y a la abubilla muñona
rastreando con su largo pico
por el polvo del camino
cogiendo granos e insectos.
!Oh abubilla de mi niñez
con tu moño, pico largo
y cuerpo multicolor
que siempre por los senderos
sigues a carreteros y arrieros
para como alado Lázaro
recoger de ellos migajas y sobraduras
buscando el gusanillo
en las tierras de aguas llovedizas
con su coqueto moño,
que la emparenta con la abubilla;
en verano,y esta en invierno
dándoles vida a los campos.
Ya no vienen avefrías en invierno,
golondrinas en primavera-verano
ni tampoco se ven abubillas de senderos
que acompañan a los carreteros que barcinan
las gavillas en sus carretas a las eras.
Llegaremos a comer pan de plásticos.
