El Cronista Oficial en la Villa, del PSOE (¿quién puede negar el aserto?), viene
últimamente haciendo positiva referencia
en sus escritos (como no puede ser de otra manera sin reiterar algunas
estulticias historiológicas en que ha caído al respecto no ha mucho), al genial
y famoso artista nacido en Cártama y patrimonio activo de toda la comarca, e
incluso de España, JOSE GONZÁLEZ MARÍN,
de lo cual, nos congratulamos todos los que amamos nuestra historia incluidos
sus personajes ilustres.
Con ello coadyuva dicho cronista oficial a recuperar y a desagraviar ante sus jefes la excelsa
memoria del predilecto hijo de la villa, JOSÉ GONZÁLEZ MARÍN, tan vilipendiada
hasta la infamia denigrante por el
elemento oficial del lugar, a los cuales
deja dicho cronista en el más cutre de
los ridículos porque, si el propio
cronista ensalza implícitamente a nuestro insigne paisano (como no puede ser de
otra manera, repito), qué razón tienen
sus virtuales patrones para haberlo venido infamando hasta la calumnia lesiva, e incluso quitarle ab
absurdo su nombre al Teatro que
lo llevó en Cártama desde 1.942, siendo él el personaje más famoso de las
tablas y candilejas del mundo en su personal y noble arte escénico. Amén de
quedar fuera de todos los homenajes reivindicativos que la comarca ha dedicado a su hijo adoptivo
nacido en Cártama. Ya lo dijo Azorín en
si libro “El político”: “No hay zorra
con dos jopos; quienes no saben que es un pareado, no les pidan que escriban un
romance” Pero, est modus in rebus.VALE
OTROSI: Dejamos para otro momento el sabroso comentario que tiene lo que se dijo y se hizo constar en acta referente al cambio de nombre de nuestro Teatro, en el pleno extraordinario de 20 de febrero de 2.014. Constituye una aleluya a la incoherencia, el sectarismo y la sinrazón, sin que ello quedara a la zaga el tonsurado edil bisagra (Escalona Idañez) que tanto se distinguió cuando estaba en la oposición para que no le quitaran el nombre del rapsoda al Teatro y, en la sesión de Pleno a que me refiero, y ante el estupor general, ahora se adhirió a que no se le restituyera. Es así este hombre: Se cambia de chaqueta como las culebras rastrojeras mudan de piel.
OTROSI: Dejamos para otro momento el sabroso comentario que tiene lo que se dijo y se hizo constar en acta referente al cambio de nombre de nuestro Teatro, en el pleno extraordinario de 20 de febrero de 2.014. Constituye una aleluya a la incoherencia, el sectarismo y la sinrazón, sin que ello quedara a la zaga el tonsurado edil bisagra (Escalona Idañez) que tanto se distinguió cuando estaba en la oposición para que no le quitaran el nombre del rapsoda al Teatro y, en la sesión de Pleno a que me refiero, y ante el estupor general, ahora se adhirió a que no se le restituyera. Es así este hombre: Se cambia de chaqueta como las culebras rastrojeras mudan de piel.