(A quienes han perdido la memoria política e
histórica)
Una
sociedad civil que descuida, o prescinde
totalmente com es el caso, su memoria de
los hechos políticos e históricos, es una sociedad a merced de demagogos, embusteros y corruptos
tahúres arribistas. Nos dejamos engañar
como pardillos con el truco zocato, ya añejo (así vino la II
República y el Frente Popular, etc, en los años 30), de hacer mucho ruido como columna con que la extrema izquierda pretende ocultar,
y lo consigue no pocas veces, sus
espurias y consuetudinarias contradicciones antipatria y anti demócratas. Son
maestros en ello, amen de fieles sin
fisuras al principio de Maquiavelo, “El
fin justifica los medios…”
Sin más preámbulos, voy al grano: En un
célebre debate entre Pedro Sánchez y
Rajoy en TV no hace tantos años, Pedro Sánchez,
con premeditada alevosía y desfachatez irrespetuosa ante una audiencia mundial, llamó a
su oponente, el señor Rajoy (aún Jefe
del gobierno), INDECENTE.
Y ya estamos nuevamente cayendo en las
mismas trampas consuetudinarias a que desde
Pablo Iglesia el linotipista fundador en España del PSOEde marras nos
hemos tragado de la izquierda en forma de marrones los españoles decentes y de
orden. Parece cierto que el Rey don Juan
Carlos I ha cometido errores, ¡pero!: ¿Anulan estos errores ---siempre menores que los que
han cometido y siguen cometiendo sus detractores--- la proverbial labor
positiva en bien de España que don Juan Carlos ha llevado a cabo durante 30
años?
Día
a día contemplamos a la “DECENTE”
izquierda española dando lecciones de moral de cintura para abajo al
mejor Rey que hemos tenido en muchos siglos
quien, de forma sabia y ejemplar, admirada por el mundo entero, fue el artífice
del tránsito en paz de una Dictadura de cuarenta años a, una placentera
democracia nunca vivida en España, que nos trajo bienestar y progreso impagables. A un gran Rey
al que le acusan de todo con un vocerío mediático sin par, todos los mentirosos nacionales; mequetrefes que se arrogan (¡ojo!: desde el
gobierno) juicios graves que sólo corresponde a la Justicia valorar y determinar
la gravedad personal del pretendido presunto; ¡pero del drama económico en que
han metido a los españoles estos hideputas
vocacionales, ineptos e
irresponsables fundamentalistas, no hacen examen autocrítico!
Pero, interroguémosnos sobre la conducta que
oponen a la “INDECENCIA” los “DECENTES” consabidos:
-- Es DECENTE para ellos seguir
escondiendo tras cinco meses de pandemia el número real de muertos por irresponsabilidad..
--
Es DECENTE para ellos inventarse tácticamente un ficticio tribunal de expertos, para, a renglón seguido negarse a dar a conocer la identidad de sus
componentes, y, a explicar quienes redactaban
los informes técnicos, para terminar como siempre reconociendo al Defensor del Pueblo que todo
era mentira. Una más entre tantas.
-- Toda esta DECENCIA de la
nefanda izquierda es cortina de humo: Obligan a que el Rey sea expulsado mediante presiones nefandas de la Zarzuela en donde
lleva viviendo 30 años o más, para después considerarlo a los cuatro vientos
como un rey fugado, porque el espectáculo de un rey a la fuga tapa y
minimiza el saqueo a los Ayuntamientos,
a los que Favoreció Rajoy; sin olvidarnos que el PIB cae en picado hasta un
20%.
-- Mientras atacan al Emérito por supuestas
comisiones obtenidas con soportes corrientes a Arabia Saudí como intermediario
de una fabulosa venta del AVE que promocionó la riqueza de España, nadie se pregunta cómo
ha hecho Felipe una fortuna, y, por qué Podemos está encartado por Hacienda que
le reclama 500,000 euros por movimientos fiduciarios no declarados, y, los 680
millones de los ERE, muchos de ellos
para putas y drogas, o los 290 millones de la familia Pujol; ni tampoco sacar a colación la Caja “B”
de partidos coaligados. Y se
extiende una nube de humo sobre el paro
que alcanza cifras siderales, y sobre el
hambre que abarrota ya cada día las
filas de comedores sociales, etc.etc.
En estas gestiones tuvo que viajar el
Rey Emérito y débese recordar que iba acompañado de diputados, senadores y
financieros que eran obsequiados tras los postres por lo árabes con un reloj de oro y brillantes a todos y
cada uno, que eran cuidadosamente guardados en sus respectivos bolsillos.
En
definitiva por hoy: ¿Quién entre Pedro Sánchez y Pablo Iglesias tiraría la primera piedra sin el Rey hubiese
plagiado una tesis universitaria y falsificado, nada menos que la autoría de un
libro que no escribió? Pues ese es el tribunal
ético que juzga los errores ´de un
anciano Rey que sólo bien ha hecho a España.