Aunque un tanto olvidado
hoy, Antonio y Manuel Machado tuvieron
un hermano, José, que fue
consagrado caricaturista, colaborador de
los más importantes periódicos de su época que coincidió con la del genial
artista guadalhorzano, nacido y enterrado en Cártama, José González Marín, gran
amigo suyo como de Antonio y Manuel.
La que aparece arriba es
una caricatura al artista guadalhorzano, Pepe González Marín, realizada por su citado
amigo, José Machado, que ilustró muchas reseñas que, en la prensa de su tiempo, le dedicó la crítica literaria y teatral al
artista comarcano nacido en Cártama, a la cual, como a España entera y a sus poetas y poesía, dio a conocer e imprimió pátina
y gloria por todo el mundo de habla hispana.
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Antes fue el pueblo
de Alhaurín el Grande el que, con motivo del 125 aniversario de su nacimiento le puso el nombre de José González Marín a una calle de la
villa, y organizó un acto a modo de justa literaria en su honor que tuvo un
enorme éxito. Aunque Cártama no tuvo en cuenta la fausta efémeride, hay que
reconocer que al acto ofreció testimonio
de presencia el entonces concejal de cultura de Cártama, Francisco Lumbrera.
Ahora es la Televisión Alhaurín de la
Torre-Torremolinos la que se propone llevar a cabo un homenaje con carácter comarcano del hijo adoptivo de
muchos de sus pueblos, como incluída Ronda, como también lo fue de Málaga
capital.
Sin ánimos hacer una
crítica congruentemente ácida, sigue llamando la atención que Cártama que fue
su cuna no sólo trate de nublar la memoria de tan insigne hijo, sino que
algunos miembros de las minorías “inselecta” la calumnie y vitupere dejados de llevar
de patológica e intensa envidia de su fama que creen que a los cincuenta años
de su muerte le hace sombra al protagonismo que desde su indigencia intelectual
creen que se merecen. Lo malo es que estos falsos hombres y “hombras” pretendidamente
de pro, tienen cierta capacidad de crear
corriente de opinión que, por cierto, ya se les está volviendo en contra, como
no podía ser de otra forma, aunque es verdad que la mentira y la calumnia tiene siempre
más y lenguatones abogados que la verdad
y la decencia.
Callen los tales y
sepan, que que pese a sus viles designios ha habido, y hay personas, que a base
de artículos, libros, conferencias, etc. han recuperado como un valor esencial
de la cultura comarcana la memoria y figura de pepe González Marín, y ello,
irreversiblemente. Alas redes sociales, hemerotecas, bibliografías, etc, me
remito.
Un dato que ratifica lo que antecede lo tenemos en el
hecho de que al Teatro que en el año 1.,942 se hizo en su honor propuesto antes
por un alcalde socialista durante la república, que desde entonces fue una referencia cultural
de la comarca, que otras corporaciones municipales de Cártama, incluídos de
ideología socialista y comunista han dejado constancia de respeto, admiración y
homenaje a nuestro insigne paisanos, ahora nuestra corporación municipal
acuerde quitarle su nombre al Teatro que lo llevó desde 1.942, para rotularlo
con una chabacana palabreja que encima es una garrafal falta de ortografía.
¡Quitarle en Cártama el nombre de un
artista de las candilejas, cartameño de fama mundial al que la prensa nacional
y extranjera dedicó más espacios que a ningún otro a lo largo de toda la
primera mitad del siglo XX, no hay que estrujarse mucho el caletre para caer en
la cuenta de que estuvimos el día de “autos” regidos por mandamases con menos luces que la que da un candil de tinados…! ¿O no?
¡Que tanto político
se apuntaría la actual corporación si restituyera a nuestro teatro su auténtico
y legítimo título!
