Periódico digital “El aguijón” (“elaguijon. es”) 2-7-2.010
En aquel entonces
decíamos sin pelos en la lengua:
Dos
significativos hechos entre antié y hoy nos hacen redactar esta reseña. Vamos a
referirnos aquí a uno de estos hechos.
Ayer
apareció en prensa la noticia
de que una sociedad privada de Coín sustituye el cometido de la cartameña, Cooperativa Malaca, quebrada en
su actividad social y en sus cuentas, se supone que por errores inocentes de sus mandamases, precisamente cuando el bum urbanístico, dejando (la virtual quiebra) con dos cuartas de narices y esquilmados de
hacienda e ilusiones, a más de 700 socios y un montón de trabajadores
directos e indirectos. El fin social de esta
nueva empresa, recalcamos, es el mismito que el que tan mal le ha ido
a una Cooperativa del mismo ramo y
actividad, ¡lagarto, lagarto…!.
El solar (¡lagarto, lagarto…!) en que se
ubicaba Malaca en Estación de Cártama, cabe la carretera de Cártama a Pizarra,
vale un perraje tras una adecuada y socorrida (ya nos entienden) recalificación
del ala. Desde esta Asociación Ermita Los Remedios, y a instancias de socios
con intereses (perjuicios) en aquella, intentamos recabar noticias del entuerto
ante los mandamases de Malaca y, la respuesta entonces, fue más significativa
que obscena, con serlo esto mucho: ¡No
meter vuestras sucias narices en donde no os importa!”. Aunque más sutilmente, la misma respuesta que han
venido obteniendo los socios más humildes (la mayoría) cuando intentaban saber
el destino de sus entregas de dineros, amén de las de frutos que le pagaban a
“pedoputa” (con perdón) y tarde. Conocemos un leal socio
que, como otros, ha perdido las
trescientas mil pesetas de las antiguas
que entregó a Malaca para enjugar pérdidas comerciales. Pérdidas comerciales en
una Cooperativa que sólo gestionaba la venta de los frutos de sus socios sin
coste de compra, cuyo precio de venta, deducido gastos de gestión y
manipulación y ratios de amortización de capital e instalaciones, era lo que
pagaba a estos socios de la forma antes
mentada ¿Cómo puede devenir en quiebra virtual una empresa que opera de esta segura manera comercial? ¡Lagarto, lagarto…! Los
mandamases y socios más significados --los “tetarutos”, como son conocidos por
los socios pequeños de platea--, planifican (los pillines) que el Ayuntamiento
les subiera el techo de edificabilidad de sus proyectos urbanísticos en los
terrenos de asiento de Malaca, o, en caso contrario, irían al cierre definitivo
del “negocio”. En su día aplaudimos al
equipo de gobierno municipal, y reiteramos el aplauso hoy, porque en aras de
conservar los puestos de trabajo accedieron, incluso con dudosa legalidad, a
elevar dicho techo de edificabilidad pero a cambio de que en terrenos de
Casapalma Malaca continuara su actividad
cooperativa. Los mandamases dijeron que, a ellos, todo o nada, y por tanto,
cerraron. Y dejaron en la calle a un montón de trabajadores y a los pequeños
propietarios, como siempre, en las pezuñas de los especuladores del ramo, esos
dedicados a comprar barato en el campo y vender caro al público, con perjuicio
sangrante de ambos sectores.
Cuando
vieron posible beneficio electoralista acudieron a la movida otros
especuladores no menos nocivos, los políticos que no por ello dejan de ser
también rurales: Los acá egregios (as) Pepe Escalona (CEPIC), Leonor García
Jule (PP), el de IU, y algún que otro
partido; y celebraron reuniones, no con los pequeños
productores para ayudarles en su indefensión, sino con los “gordos”,
para, al parecer, apoyar su voraz
instancia ante el equipo de
gobierno del Ayuntamiento de Cártama del que, ellos mismos, son concejales en
la oposición representando a un casi igual número de electores cartamitanos,
con lo que, más que coadyuvar al arreglo
del clamoroso entuerto, lo enconaron capitalizadamente aún más, cosa por otro
lado habitual en ellos. Viene a pelo endiñarles la siguiente pregunta ¿No os da
verguenza política, o de la que sea en buena mención, mamasopas y macanditos consuetudinarios, de que ahora con el cadáver aún fresco de
Malaca, una empresa privada intente
llevar a cabo un proyecto mercantil del mismo ramo, calculando beneficios,
obviamente, en el terreno de vuestros fracasos y del triunfo de lo presuntamente
espurio? ¡Lagarto, lagarto…! ¡Qué poca vergüenza torera!
Moraleja: Una sociedad que casi por sistema promueve
para que le gobierne y administre los bienes públicos a gentes con chorlas indigentes y caletres tan pintorescos
y faltos de cultivo humanista como los que por doquier vemos encaramados
en todos los puestos de
responsabilidad de la política y la
administración, es una sociedad extraña y preocupante que evidentemente camina hacia su propia ruina.
Verbigracia: la prensa de hoy, día 2 de julio, nos
informa de que el infumable Zapatero ha regalado TRES MILLONES DE EUROS (casi
cinco mil millones de las antiguas pesetas) a su guardia pretoriana -que no
defensores de los trabajadores- los Sindicatos y, a Fundaciones afines al PSOE,
al igual que el gobierno paga un homenaje al fundador del PSOE, Pablo Iglesias,
así como subvenciones a grupos
promemoria histórica, o sea, distorsionadores de la historia, cual está visto y
comprobado.¡lagarto, lagarto..!
Asociación Ermita Los Remedios
Pte: Fco. Baquero Luque