Hoy la clase política se ha olvidado del pueblo que los puso en el sitio en que medran y afanan y, gastan el tiempo que debieran dedicar a quienes les votaron y pagan el sueldo que ellos mismos se ponen, lo cual resulta inusitado y caciquil y, encima, meten en el Gobierno de la Nación a los de su calaña. 

Y, lo más triste de esta nefanda situación es que ya, el nefasto responsable que jamás ganó unas elecciones, hoy, gobierna a España porque se ha quedado espuriamente a base de maquinaciones obscenas, traiciones, y ventas por una moción de censura prevalido de una sentencia judicial que no era de recibo invocarla para el ilegal fin que se aplicó por un "tal" que está maquinando vender un inseparable trozo de España, por siete votos aplicables a sus podridos intereses eludiendo las urnas, y seguir mal gobernando la Patria.