NOTA: En las
definiciones que siguen, cualquier parecido con la realidad es mera apariencia:
que en peligrosa emergencia piensa
con sus piernas.
felicidad…, cuando llegue el
futuro.
un tonto de sí mismo y una ruina de su país,
verbigracia: Don Pedro Sánchez.
foro a lo bestia.
de
pie y firme la columna vertical de la corrupción nacional.
cabalga después de muerto.
en las que
se han embutido todos los chorizos de España y él el morcón de la ristra.
El bichito maldito con el que el gobierno nefando que
padecemos ha matado miles y miles de ancianos para aliviar las partidas de
pensiones, sanidad y dependencia.
de la
inteligencia infantil que convierten la noble madera en virutas, especialmente
en Cataluña.
palmas y olivas,
jueves, la inocencia condenada a muerte
de cruz y el ladrón vitoreado.
A la mía, la república nefanda le secó para
siempre el manantial de su alegría y el
gorjeo de su mirífica garganta y, nunca
más para dormirme, me cantó los mullidores y los pajaritos de la Niña de la
Puebla que tan bien cantaba, aunque siempre siguió amando el rosal de pitiminí
que ella plantó para su niño, cabe las jambas de la ventana del dormitorio daba al campo arbolado con
limoneros, naranjos, limas, asofaifas y gráciles perillas sanjuaneras.
e Iberoamérica con un arte nuevo y noble y que más hizo por su pueblo de
nacencia y, el pago que este ha dado a su memoria, define como es su pueblo.
las personas a quienes debe
hacer justicia y proteger la ley. Le
debo una parrafada.