Aunque conlleve
algo de liviandad (exclamación gruesa a
propósito de ciertas situaciones), la falta
de educación reside en un hábito, e incluso en una condición humana, que se
manifiesta en la falta de
responsabilidad social ante situaciones especiales generales.
Independiente
de la mala gestión de la pandemia por parte del gobierno, la actitud de la población es de una irresponsabilidad
suicida. Como se esperaba, ya han empezado los rebrotes, al parecer con virulencia
mutada más grave. No debemos olvidar que según los anales, esto fue lo que
sucedió en la célebre pandemia de gripe española de 1.918, con un rebote que
contó 50.000.000 de muertos a Europa. Sigamos frivolizando, gobierno y población, con
un virus que aún no conocemos.
En dos comarcas de Huesca y otras
de España, ha habido ayer y hoy rebrotes
alarmantes.