1º- El trono de arriba fue un regalo que durante el exilio de la Virgen por América, le regalaron en una de las repúblicas y que José González Marín no hasta que no llegó en barco a España y Cártama. Cuando José González Marín vio que tenía grabada la efigie de Franco y el escudo de Falange, y González Marín jamás ligo a la Virgen ni su arte con la política (eso se hace injustamente con él hoy por unos cuantos chiquilindonguis) lo devolvió y encargo a Paco Palma (foto que le sigue) que hiciera urgentemente para su día otro. José González Marín fue él único artista español que tuvo huevos de recitar durante el franquismo a Lorca y Alberti. De eso hablaré mucho en mi blogs a partir de ahora.
2º) La foto de abajo es del piano que la Casa de ESpaña en Nueva York, regaló a la Virgen de los Remedios de un pueblo de España, cuando allí supo González Marín por una carta desde Cártama, que su antiguo piano había sido quemado, y lamentó el hecho.
Este piano se pudre, cargado de historia de Cártama (origen, motivos, acompañamiento durante las novenas y actos parroquiales durante décadas) en los altos del Coro de la Iglesia parroquial ante la mirada de todos.