En Cártama pueblo cunde la
indignación por el anuncio que ha hecho su cura párraco de que “se va a poner a la Virgen de los Remedios
bajo el sobaco” y, la va a trasladar en
plena virulencia del “coronamuerte”, a la Iglesia
Parroquial, pese a que para el 22 y 23 de abril (días señalados de las fiestas
patronales marianas de la Villa) las autoridades civiles, con responsable criterio,
se opusieron a ello.
Algunos, un tanto dejados de llevar de su imaginación, ven en esta “operación” que el
cura tiene interés en ello para poder vender las velas que lógicamente no vendió el
día de la bajada y procesión de la Patrona de Cártama.
Nos limitamos a constatar un hecho
del que el pueblo se hace lengua.