En abril de 1.485, las huestes del Maestre de Santiago, que formaban parte del ejército de los Reyes Católicos, decidieron tomar por asalto la "medina" de la plaza de Cártama. Pero, los guerreros moros se replegaron e hicieron fuerte en el Castillo fortaleza. Sólo se rindieron, ante la presencia del propio rey, Fernando el Católico, quien les conminó a ello bajo la advertencia de que si daban lugar a derramamiento de sangre al tener que tomar por asalto el Castillo, todos los supervivientes serían pasados a cuchillo, como lo fueron los habitantes de Benamaquí en las estribaciones de Sierra Gorda.
La rendición se produjo el 26 de abril de dicho año de 1.485 y, los moros de Cártama pudieron marchar al exilio en tierras de África y no vendidos como esclavos. Los "moriscos" (moros convertidos al cristianismo) quedaron cultivando la tierra de los montes circundantes y, otros, en Casapalma.
En esos días, se celebró Concejo en la Alcazaba del Castillo, en la que Los Reyes (se ignora si estuvo la Reina, embarazada de tres meses de su hija Catalina, después reina de Inglaterra) diseñaron la estrategia de la toma de Málaga, que tuvo lugar en 1.487.
Un hecho poco conocido, es que un oratorio árabe que había en la falda del Castillo, fue habilitado por alarifes cristianos para Santuario de la Patrona de Cártama, Ntra. Sra. de Los Reyes, porque era la misma imagen que los Reyes llevaban en su tienda de Campaña. El apelativo de "Los Remedios", no se produjo hasta 1.579, cuando la Virgen hizo el milagro de la "peste".
Algunos cronistas, dan testimonio analógico de la procesión organizada para "subida de la Virgen por primera vez a su Santuario", en la que participaron todos los soldados con hachones encendidos, trompetería imperial que inundaron de himnos las oquedades serranas aquel atardecer de 26 de abril de 1.485. Iban capitanes, cardenales y sus huestes, marqueses, nuevos colonos que acompañaban a los Reyes, artesanos, boyeros, muleros, herreros, herradores, carpinteros; en total, una procesión que salía del llano, después llamado de Talento junto a la acequia agarena del Barullo, y llegaba hasta la sima del monte a cuya cabeza marchaban Sus Majestades. Da escalofríos imaginar el grandioso hito histórico.
Prometo ampliar en otra ocasión sobre este hecho tan trascendente para Cártama, que, en otro sentido, repitió cinco siglos después un juglar universal llamado, José González Marín, nacido en Cártama, que en carne y hueso escribió una cantiga mariana emula de las fabuladas por los poetas del Mester de Clerecía, cuando nacía la lengua española, que en 1,492, Nebrija compilaría en la primera Gramática de Lengua Española, coincidiendo con el descubrimiento de América.
Para conocer esta integración de Cártama en la Historia Universa al ser tesela significativa de la de España, invito al lector a que lea mi libro (750 páginas estructuradas en capítulos por materias) "CÁRTAMA HISTÓRICA. EL JUGLAR Y LA VIRGEN PEREGRINA".
