miércoles, 28 de septiembre de 2022

 

LA ESPAÑA QUE PEDRO SANCHEZ HA HECHO

Transcribo literalmente un titular de un periódico nacional. “ EL PRECIO DE ERC  A SANCHEZ: QUE 40 CARGOS SE LIBREN DE PRISIÓN”.

“Condiciona ERC su apoyo a los Presupuestos de 2023 a que se le garantice que ninguno de los pendientes de juicio por el 1-0 puedan ser encarcelados”

Las causas abiertas a los independentistas es por presunta desobediencia a la Justicia  y malversación. Ignoro cuantos años le caerían  por estos supuestos a cualquier españolito de a pie, pero unos cuantos, seguro que le caían.

Antes que ceder a este oprobio a todo un país, un presidente mínimamente decente, prolonga los presupuestos y aplica el 155 en todas sus líneas sin medias tintas y, por supuesto,  anularía  la autonomía.

Ya, solo decir que tenemos un gobierno sustanciado por mamandúrricos y sinvergüenzas políticos y políticas. No digo “Viva Franco” porque no se si la ley socialista de mielda lo castiga.

 

SOBRE LA DATA DE LA VIRGEN DE LOS REMEDIOS

Ignoro cual habrá sido el dictamen de los  escultores  sevillanos al tener en sus manos para ser restaurada la imagen de nuestra  Patrona la Santísima Virgen de los Remedios.

Yo, varias veces  he tenido ocasión de  oir el dictamen  en ese sentido ---y así lo tengo plasmado en tres de mis libros  (“El Juglar y la Virgen Peregrina”, en mi sección de, “El faraón de los decires” y en “mi biografía de la Madre De Jesucristo, “MARIA de Nazaret”)--- de la Egregia familia de escultores, Palma (Paco Palma, padre, y sus tres hijos Francisco, Rafael y mi fraternal amigo, q.e.p.d, José María) y, en otra ocasión nada menos  que de Santiago Rusiñol que estuvo analizándola esculturalmente en la Ermita (de la que hoy es okupa), y otros. Todos por separado en tiempo y espacio, concluyeron coincidentemente en que  es una talla del siglo XV, realizada  en el taller de esculturas que tenía en Sevilla la Reina Isabella Católica para suministrar  Patronas y titulares a todos los pueblos que los ejércitos iban recuperando de la invasión abindarrábica y jarifeña que, al parecer añoran en exceso patológico algunos. Qué le vamos a hacer; el nuestro es el país de entre otras “virtudes”, las paradojas y las pamplinas.   

sábado, 24 de septiembre de 2022

 

 

GRAN CACICADA CULTURAL DEL EQUIPO DE GOBIERNO DE CARTAMA

I

Referencias.- El Exmo. Sr.D.  José González Marin, era natural de Cártama, que le nombró Hijo Predilecto de la Villa y´, Cártama, le rindió multitudidario homenaje con motivo de ello y de   haberle concedido el gobierno Republicano la mayor condecoración que se otorga a un personaje civil no militar: “·La Gran Cruz de Isabel la           Católica” y el Collar de Alfonso X el Sabio.  Una Corporación  de la II República presidida por el alcalde republicano socialista, querido  tío abuelo de este autor,  Don. Antonio Vargas Franco, le nombró hijo predilecto de Cártama y, por tal motivo y, haber avisado por teléfono desde Málaga al rapsoda cartameño, José González Marín que recitaba en Andújar, de que una reunión del Comité Socialista  había acordado quemar la Imagen de la famosa  Patrona del pueblo, Nuestra  Sra. de  Los Remedios ---tal hicieron con todas las imágenes parroquiales (soberbio tesoro de devoción, tradición e  histórico)---, mi tío abuelo ex  alcalde reùblicano  de Cártama, fue asesinado por sus compañeros, pero alegando estos que lo hacían porque era un capitalista que tenía una piara de cabras. Piarilla pequeña que él mismo llevaba caca día al pastoreo y, por las noches él mismo  ordeñaba para, con precio de la leche, dar de comer a su familia: esposa,  dos hijos varones y una hija menor que estos.

José González  Marín estaba  Licenciado en Derecho por la Universidad de Madrid pero, no ejerció porque su vocación no eran las leyes, sino el arte de Talía, o sea, EL TEATRO.

             Muy joven, pues (algo grande vería en él cuando le hizo una prueba  la gran dama de las candilejas, doña María Guerrero) que lo admitió para  formar parte, como primer actor joven, de su compañía, una de las tres más famosas del mundo con   la de  Leonora Duce (italiana) y  la genial (francesa), Zara Bernat (francesa), que le invitó dos veces a alternar funciones con ella en París y, lo propio, hizo en Nueva York Eleonora  Duce, amante del escritor, periodista y político,  Gabriel D´anuncio que le presentó a José González Marín al que, aquel, le regaló su libro, “El Fuego”, dedicado a su relación apasionada con citada  la actriz la DUCE; libro que tengo la dicha  de que José González me regalara,  y conservo. Ambas actrices   consideraban  un honor alternar, siquiera una vez, con el mejor recitador del mundo de todos los tiempos, que era de Cártama ---¡¡¡que, obremos en consecuencia con su memoria los cartameños, porque  ¡¡¡Era de Cártama!!!---; pueblo que hoy tiene  un alcalde  sui géneris  e indigente intelectual que trata por  motivaciones que no ha tenido cojones explicar  pero claramente tratando de borrar de la historia y conciencia de la gente nuestro  proverbial patrimonio histórico y entre ella la  verdad de nuestra tradición mariana de la Virgen de los Remedios y de quien la salvó en un momento aciago de nuestra convivencia, de ser quemada tal tenían aprobado  en Comite spcialista en Seción con elalcalde a la cabeza borrar de la memoria del pueblo la imagen de quien es Patrimolnio cultural egregio de su pueblo al que hizo famoso y dio pre y gloria por el mundo entero  de habla hispana.

                                  SEGUIRA CON UNA IIª Y UNA IIIª

viernes, 23 de septiembre de 2022

 

OTRO VIVIDOR MÁS EN CARTAMA

Tenemos el caso de que el  alcalde mas fantochepopulista que ha tenido Cartama, fotogénico patologíco, de caletre inane y entendederas parcas pero, desalmado hasta la injuticia presutamente punible y moralmente reprochable falta de caridad, engañabobos y afinado a los lameculos que le ufanan hasta el orgasmo de cacumen, ha organizado una Asociacion Cultural? sin otro fin  que el de mantener el nombre espurio de Carthima al Teatro José González Marín que por presunto odio por evitar nuestro laureado hombre bueno citado que los socialistas llevaran a cabo el acuerdo del Comité  de quemar la imagen de la patrona de su pueblo,  Nuestra Sra. De Los Remedios con cinco largos siglos de patronazgo implantado por los Reyes Católicos ha hecho vicepresidente de dicha Asociación al tiralevitas y engolado  filosofante  cuyo nombre yo no cito. Y sobrado de motivo.

¡Vaya, vaya la urdimbre caletral que en los puestos significativos va arrejuntando Cártama, al mando del inane Jorge Gallardo, malo, vengativo  y populachero de leche. Pero taimado y fingidor como un zorro con dos jopos.

martes, 20 de septiembre de 2022

 

EN AUSENCIA DE MI VIRGEN  DE LOS REMEDIOS

            En la ciudad del Betis, en donde  el taller

De la Reina  Isabel la Católica, y por su encargo,

 fue  tallada, está hoy para su restauración

Nuestra Sra De los Remedios,  patrona nuestra;

y, yo, desde  nuestro lugar la invoco  con saudade.

***

Un día,   en momentos aciagos de mi vida

 Se vino abajo mi vital esperanza y,

Del mundo en vez de coger  flores

Sólo agudas espinas cosechaba.

Me imaginé una vez cercano de mi tumba,

Cuando de pronto vi ante mí

La imagen maternal y divina

De nuestra Santa Virgen de los Remedios

Que transida de un  hálito de gloria

Me dijo; “¡¡Lucha que estoy contigo,

Y donde esté yo invocada, soy LA ESPERANZA!!

¡¡¡Lucha, que por el que lucha,

Como en Canaan, yo le pido

A Mí  Hijo que siempre me escucha!!!

¡Adelante, hijo,  lucha, lucha que

Luchar es vida y la cobardía mata el alma!

¡¡¡ Y ELEGÍ LA ESPERANZA…!!!  

 

 EL PORQUERILLO

                                        

A Mayrata, hija de mi amigo Juan Andrés, para que sepa cómo vivían muchos en época de sus abuelos.

Vuelvo a dedicar este comentario de mi libro, ECOS DE LA ALHÓNDIGA, a mi entonces pequeñita amiga y hoy toda una alférez del ejercito en la Academia Militar de Zaragoza., donde continua sus estudios militares hasta terminarlos, supongo  que de teniente para llegar (es capaz de ello) a Teniente General. Siento por ella y por  sus padres una autentica amistad y cariño.         

   Raspasayo –mote por el que se le conocía popularmente-, además de barbero en Cártama, ponía indersiones, sacaba muelas si se terciaba, y ejercía de capaó de cerdos, e incluso de cerdas      -que ya hay que tener arte en cirugía veterinaria-, operación necesaria al meterlos en engorde para su posterior sacrificio en el matadero industrial o en la ritual matanza casera prenavideña, cual era tradición atávica en los pueblos andaluces, al menos en las familias medianamente pudientes.

Aquel domingo, antes de apuntar el sol, Raspasayo se dirigía a lomos de su burra -aparejada con enjalma, mandiles y corona de días festivos- por el Camino de las Angosturas hacia el Cortijo El Gato, en la Dehesa de Arriba, desde el que le habían mandao  recao para que fuera a capar una punta de cochinas, próximas a entrar en cebo en montanera o estabulación.

También, espatarrao delante de su regazo, el capaó llevaba a su hijo, un zagalillo de como seis años, al que sostenía con la mano que le dejaba libre el manejo del cabestro con que encarrilaba la cabalgadura.

          En un  rastrojo de cañas de maíz cercano a la trocha de rodadura, un porquerillo de unos siete años, pintoresca pinta y pobres trazas,  guardaba  un hato  de cochinos.

 El campo ofrecía aquella mañana un panorama de opresiva  tristeza invernal. La humedad ambiental aún mantenía pegada a la tierra el humo de las candelas que los jornaleros encendían en los tajos con taramas y ramón de tala para paliar el frío, a la guarda de  que capataces y manigeros dieran la orden de meter mano a las  faenas camperas.

Pastueñas yuntas araban ya en las besanas de las pardas hazas  de sembraduras, dándole tempero de cosechas a la tierra madre. De  lontananza llegaba el eco de una copla caminera lanzada al aire por un carretero al son lento de los platillos de su carreta.

El gélido terral atería el cuerpecillo del zagal porquero que tiritaba como un patalete descolgado del tibio y plumoso nido. Su instinto, aguzado por la perra vida, le indujo a resguardarse,  poniendo en pie un par de pañetas de cañas de maíz, derribadas ya a finales de verano sus mazorcas, contra las que se arrecachaba de espalda a poniente, eludiendo así la terralera. Intentaba proteger sus pies desnudos que apenas cubrían los capellás de pleitas de sus alpargates de esparto con suelas de trozos de ruedas viejas de camión, sentándose sobre ellos en la cruda tierra, a manera de diminuto buda.

Para  tener a raya a los cochinos, los apercibía en su instinto animal de que él no los perdía de vista y estaba siempre pronto a cruzarles el zurriago si se desmandaban; de vez en cuando se erguía para reprenderlos con el onomatopéyico sonsonete, propio en el menester de los porqueros de la ribera del Guadalhorce: ¡guigggníii...!, crujiendo al mismo tiempo la puntera del zurriago, con lo que conseguía que la piara permaneciera agrupada y, tras ello, castañeándole los dientes por el relente, volvía al resguardo de los haces de ricias, liado, cual si fuera un espantapájaros, en una vieja chaqueta de varias veces su talla, ya muy usada, con la que alguna alma buena habría dulcificado su conciencia regalándosela. En las bocamangas de la prenda embozaba sus infantiles manos prematuramente encallecidas por un trajinar, que ya era en sí duro para mayores que él.

 A media mañana, Raspasayo y su hijo retornaban al pueblo a lomos de su rucia por el mismo camino que antes anduvieron en sentido contrario cuando, de pronto, advirtieron que el amo de la piara de cerdos, que había aparecido por el careo para echarle un vistazo, increpaba al porquerillo con desproporcionada acritud, incluso para lo acostumbrado entonces. El caso es que, en un descuido de éste, uno de los marranos, al ventear las batatas de un pegujal próximo, se había salido del hato y hozado algunos lomos de uno de los canteros, casi ahitándose de boniatos, por supuesto más sabrosa pastura que los granos sueltos y los hormigueros de alúas que los gorrinos rebuscaban en el rastrojo:

 

-¡Eres un irresponsable y un inútil...!. ¡Anda, coge el camino y que yo no te vea más por aquí! Mañana buscaré otro porquero menos vago que tú -le zahería el amo de los cerdos.

 

         Sobraban motivos para que un niño llorara. Pero el porquerillo sabía bien que, si era capaz de hacer faenas de hombre, como un hombre tenía que ser capaz de tragarse la congoja y culpabilidad que sentía en ese momento. Le habían imbuido que cuando un animal se escapa de la piara y causa daños  en sembrado ajeno, el dueño perjudicado podía acudir al guarda jurado, ese que llevaba correa ancha de cuero en bandolera del hombro a la cadera, con placa en medio grabada y tercerola colgada. En todo caso, había que pagarle al perjudicado los daños causados en su haza por el cochino desmandado. Estos eran los usos y costumbres ancestrales con categoría ya de ley positiva.

  A Raspasayo la dura escena le trocó sus pensamientos en sentimientos y, en un acto reflejo, apretando a su hijo contra su regazo, abogó así por el porquerillo:

 

-Ya está bien, amigo... ¿No ve usted que es un niño, y está helado de frío? Eso pasa todos los días y a cualquiera, incluso a mayores que él  y, al fin y al cabo, el daño no ha sido del otro mundo. Sólo se le ha escapado un cochino...

 

La respuesta del amo de la piara no dejaba lugar a más alegaciones:

 

- Con su edad, la vida también me obligaba a mí a guardar guarros y demás ganado en los manchones. Si encartaba, hasta dormía con ellos en los pastos, bajo las estrellas, en las noches de alta primavera y verano, aguantando algunas veces bruscas tormentas o escarchas, sin otro cobijo que un cacho de toldo viejo y  una arpillera rellena de sayos como colchón. Y tenía que ser más responsable que este porquero, si quería  servir amo para ganarme la manutención.

 

El  bujeo del camino era ya barro pegajoso, debido a las recientes lluvias. El zagalillo, tenía los alpargates y el alma hundidos en el lodo gredoso, y era imagen estremecida de la virtud original derrotada. El capellá de esparto de su calzado, al humedecerse, le apretaba los pies, por lo que el chiquillo andaba con dificultoso renqueo.

             Raspasayo, asiendo a su hijo en tierna empatía de dolor moral, arrimó la jumenta al balate de la trocha y, desentendido ya del  amo de la piara de cerdos, indicó con un ademán al chavea que se montara a la grupa.

 

- Agárrate a  mi cintura, hijo, no te vayas a caer, que esta burra  hace extraños.

 

         Atenazado a su protector, en silencio, con el dolor comprimido en su rostro, prematuramente curtido por los ingratos avatares, el porquerillo lloraba en aquella cenizosa mañana silenciosas y amargas lágrimas, tal las lloran los hombres de cuajo ante la injusticia.

 

- Dime, ¿qué edad tienes?

    - Mi madre me dice que estoy metido en los ocho años.

- ¿Y por qué no estás en la escuela?

       - Cuando encierro el atajo a la puesta del sol, voy a la escuela de noche que Ignacio tiene para los hijos de los jornaleros. Sabe usted, ya me sé de memoria las cuatro reglas. Pero no tengo más remedio que servir amo porque somos ocho hermanos y mi padre  no puede mantenernos a todos.

          - ¿Y cuánto ganas?

  - Me dan desayuno, almuerzo y la taleguilla con la merienda, de la que guardo algo para antes de acostarme.

       

  Cubrieron el trayecto -tres estadios de la vida humana a lomos de Platera-, charlando de las cosas de la vida cotidiana, hasta que llegaron al pueblo. Las campanas de la parroquia tocaban a vísperas; era la hora en la que, tras el almuerzo, los otros niños, alborozados, volvían a las escuelas.

 El porquerillo tendría que empezar a buscar nuevo trabajo de mantenido en alguno de los cientos de cortijos que entonces moteaban la hoya del río Guadalhorce.

 En su cielo infinito, el Sumo Creador, a la vista de la escena, se cuestionaría al hombre y se preguntaría si realmente era, como pretendió al crearlo al principio de los tiempos, su creatura más perfecta.

-         Cuando creé palomas, no debí crear gavilanes, se diría para sí mismo el Sumo Creador.

 

 REFLEXIONES QUE SUGIEREN LA VIDA

1.- Gran número de gobernantes de hoy ante tareas que demanda saber y responsabilidad, se abstienen y dejan la cosa para otro momento. Es lo que algunos llaman una cauta omisión. En realidad obran bien en tales casos porque si actuaran provocarían el destre. Es el caso de muchos políticos, entre ellos, paradigmáticamente, nuestro Presidente del Gobierno y de su amigo, nuestro caro alcalde y su alevín mamandurrio Espinoso. Nuestro penoso presente es fruto de no abstenerse nuestros políticos de hacer lo que no saben hacer.

2.-En esta “vará” política de ahora, toma un gran sentido y relevancia ostensible el sabio principio de Peter que reza, más o menos (cito de memoria): todo empledo inserto en una jerarquía tiende a ascender hasta el nivel de su incompetencia.  E incluso se puede seguir  ascendiendo mucho más arriba del nivel de incompentencia. La estulticia no tiene límites. Eso lleva consigo, que dado la maña de los incompetentes para disimularla, hoy los superiores imitan a los inferiores porque en realidad de verdad nada está peor visto que el esfuerzo, la capacidad y, por ende, el éxito, excluido ya del concierto social.

Naturalmente que de lo dicho  hay brillantes ejemplos en la presidencia del gobierno y en la gobernanza municipal de Cártama.

  Y, aunque queda mucho arroz que menear sobre la temática, finalizaremos este comentario en momentos en que mi ánimo y disposición esté de mejor tono.

viernes, 16 de septiembre de 2022

NO VA A GUSTAR; DIGO LA VERDAD

Es penosa la vejez del que a los muchos

Años, aun activa proyectos  que no sabe

Si los podrá terminar. Dios decide, nadie más.

¡Oh pensamiento obsesivo en las madrugadas,

Cuando el insomnio nos deja en vela frente a la vida

Que a veces es plomo fundido en las entrañas!

He  vivido y visto casi todo lo que el mundo ofrece

Y ya todo son gratos recuerdos que remanecen.

Hoy veo claramente que los malos afanan obscenos, y roban,

Mientras  los “buenos” robados  duermen la mona;

Y sienten una somnolencia diurna que al malo

 Le favorece y, y así cada día, también despiertos,

BOSTEZAN y, en eterna vaca sestean, ¡¡INDIFERENTES!!.

¡¡Oh España, vencida ya y arruinada es triste verte!!

¡Y, ciertamente, vencida lo estas; qué pena, pena, y que agudo pesar!

Hace falta, España noble, un grito tuyo que truene el cielo,

y que  a esta chusma que te rompe y te maltrata ¡¡¡LOS ESPANTE!!!,

Y devuelvan lo robado sin ningún indulto ni atenuante.

“El partido de los ERE” (es ya su nombre),

Que también en Cártama hace de las suyas a ojos vista,

En campaña ya, anuncia inversión de 7.000.000 .

Pero hasta ahora ¿dónde los habeis  tenido? Y, ¿de dónde vienen?

Y ¿en qué se van a invertir de forma que palíe la falta, por ejemplo, de

aparcamientos en Cártama pueblo? ¿Por qué oscura trama

política nunca los hacéis y, los pocos que hay los quitáis?

¿Acaso vienen los 7.000.000 del amigo presidente ("dime que amigos tienes

 y te diré que eres")  que también anuncia una inversión de 140.000 euros,

¡añadidos!, para publicidad electoral cuando ha por él brutal crisis económica?

                                    ¡¡¡¡¡ LAGARTO!!!     ¡¡¡¡¡LAGARTO¡¡¡¡                 LAGARTO…..!!!!!!

jueves, 15 de septiembre de 2022


 

miércoles, 7 de septiembre de 2022


 

martes, 6 de septiembre de 2022

   

                                                  3 MEMENTOS                                                          

El campo es belleza en vuelo,   génesis   de frutos  y vida.  El campo encierra los yo y los tú más primigenios y edénicos de la creación, el  Adán y Eva de la metáfora divina: el primer  amor y el primer pecado en carne y hueso mortal. El campo está en el Beatus ille de  Horacio  (Dichoso aquel que alejado de los negocios,/ como la  antigua raza de los mortales,/ cultiva  la tierra con los bueyes...). Y  Églogas y Geórgicas de Virgilio  que empezaba su Eneida diciendo  Yo aquel que en otro tiempo modulé cantares al son de la leve avena...”. -- y aún antié, con los canutitos de avena, o de  alcacel, apretados con el dedo índice sobre  la frente haciéndonos  una cruz,  los niños de mi generación lográbamos  pequeños caramillos de sonido singular --.  Y en Garcilaso, y en Fray Luís de León que imita a  Horacio -- “Dichoso  aquel que huye del mundanal ruido,/ y sigue la escondida senda por donde han ido,/ los pocos sabios que en el mundo han sido...”. Y en el Pablo y Virginia de Goethe, y en el Emilio de Rousseau,  y en la  aventura paradisíaca  de Robinsón Crusoe de De Foe, y, en nuestros Delibes, Blasco Ibañez, Gabriel Miró, Pereda, Armando Palacio Valdés...

 

Del  campo se ama todo porque sobre él alienta y se sustenta todo; de él mana  poesía del alma y  filosofía encauzadora de la razón.

 

Cada solsticio, va abriendo día a día, surco a surco, que diría Muñoz Rojas, secretos al campo que fue, es y será, una inmensa caja de arcanos.     Entrañan  secretos las peñas, razones de ser cada árbol y luces los caminos y realengas. Cada primavera, todo árbol es un corazón que late con decenas de nidos colgados en los que pipían pataletes implumes que luego serán voladoras  saetas con plumas.

 

Tamaña y misteriosa aventura la del grano que cae en la  amelga, tirada por mano humana, arrastrada por el viento, transportada por los insectos o el polen que auto poliniza  la planta madre. El niño de la  Alhóndiga  ya reparaba con asombro la pequeñita aguja verde que empezaba a salir de la tierra en do fue echada la semilla por el sembrador;y cómo después, ya  endeble caña crecida empanza en ella la espiga que en la era al son de las colleras de trilla devendrá en el trigo que se convierte en pan candeal, o, cómo de la maciza caña de maíz que fue leve golpe de grano sembrado en la tierra a estaquilla,  brotaba la mazorca de maíz que también era alimento.

El campo vivido en todo su sentido alto y profundo es la antítesis del odio y de la guerra. Es la paz que a veces ensangrentamos en una transgresión brutal de la razón de ser de las cosas.

                                                LA ALONDRA

            Mañanitas  estivales frescas por la brisa residual,   húmeda estela  de las ribereñas  noches con  ladridos de perros al lucero miguero, cruá, cruá...de ranas en las almatriches y  cri, crí... de grillos entre la hierba punta y las verdolagas; órdago sonoro de las creaturas mínimas al silencio cósmico de la noche.

             Antes de bajar al prosaico  rastrojo y a los duros terrones de los barbechos en do tiene su hábitat, la alondra saluda a padre sol que apunta tras las onduladas lomas al Sur de  la Alhóndiga. El canoro pájaro es allá en el cielo como  un mínimo acento circunflejo   levitando inmóvil en el azul del éter;  inmóvil, la alondra   modula sus cantos  de inefables resonancias que son remedos, ¡oh maravilla!, del trino de todos sus congéneres.  Sí, oyendo cantar a la alondra tempranera, si al tiempo no la ves puede parecerte que se trata de la  armoniosa melopea  del mirlo en celo, o del trino del jilguero en  los espinos borriqueros de negras semillas (“alpiste negro” en el argot infantil), del verderón entre  las frondas, o, el lánguido e inefable canto del ruiseñor en  los chopos del soto.

             Al solitario niño alhondiguero se le colmaban las pupilas de entrañables horizontes  y, se le esponjaba  el alma al conjuro de la jerga mañanera  de los pajarillos de los campos regadíos, sumido en un irremediable memento pánico, acompasado  por el amortiguado cantar de la madre  (“Los pajarillos”, de la Niña de la Puebla). Yo me digo, remedando a Manuel Machado:                                        

                                               A quién no le ha cantado

                                               Una madrecita buena 

                                               En un anochecer de plata

                                               Nanas que le han dormido.. 

                                                                                          

                                               SURCOS Y PÁJAROS

            Lento el arado tras la premiosa yunta abre surcos  paralelos en la besana abierta  sobre la a  tierra atemperada. El niño cortijero, sigue los pasos del gañán amigo que, con una mano en la mancera y en la otra la ahijada,  modula el  abandolado  cante de la arada:  

                                    Arando en un peñascal

                                    Se levantó la perdiz

                                   Y en lo alto de un majano

                                    Se puso a piñonear

                                                ***

                                    ¿Por qué aran las vacas

                                    Tan despacito?

                                    Es que el gañán les canta

                                    Quedo, quedito...

                                              ***

                                   “Esquilones de plata

                                     Llevan los bueyes...” (G. Lorca, popular)

            ¿Sabe el paciente gañán que es instrumento de la Gracia del Creador...? En su cantar lo de menos son  las letras, siempre simples y elementales; lo importante es el sonsonete lento y acariciante  que sosiega el  alma de los bueyes en su duro trajín.

            Pero al niño alhondiguero lo que le despertaba amor y curiosidad  era la miriada de pajarillos que cubrían revoloteando a ras de tierra, en toda su longitud el surco  abierto,   buscando en él  los insectos que son su pitanza:  orovivos, aluas, lombrices, hormigas cocineras y cabezonas, grillos, y un sin fin de  bestezuelas que la vertedera del arado chirivito iba volteando de  sus habitáculos  subterráneos.

            El zagalillo, de no más de cinco años, sabía ya el nombre de todas aquellas creaturas aladas: Pipitas, tontitos, chamarines, trigueros, cogujadas, alondras,  mosquitos y, sobre todo,  llamaba su atención los reineros blancos tamaño gaviotas que iban y venían por la besana cazando insectos sobre el lomo de los bueyes yunteros.

            Una vez, el morero  le llevó del pueblo al niño cortijero  una “costilla”-trampa  de alambre acerada con muelles letales para cazar pajarillos; como señuelo, se le ponía en un mecanismo ad hoc  un gusanillo,  después se embozaba un tanto en la movida y blanda tierra del surco. Cuando el pajarillo “picaba” el  señuelo, la costilla saltaba inexorablemente mortal,  aprisionando  el cuello de la avecilla que moría ahorcada.   Un día, el zagal vio la agonía de una grácil  “pipita” que había “picado  y tenía su  cuello gris casi partido; el niño lloró amargamente  su culpa  y ya jamás volvió a poner trampas.

 


 

50 ANIVERSARIO EN MARISTAS



 


 

 



domingo, 4 de septiembre de 2022


 

viernes, 2 de septiembre de 2022

 

3 septiembre 2.022. Caracas (Venezuela)

Rafael Dupouy

Muy querido amigo don Francisco:

Desde Caracas, Venezuela, le estamos profundamente agradecidos por dedicarnos sus entrañables recuerdos de sincera amistad con el más grande rapsoda español de todos los tiempos, don José González Marín, a quien Dios y la Virgen de los Remedios de Cártama, salvada por él, lo tengan en su Gloria.

¡Qué experiencia tan enriquecedora y maravillosa!

Como aficionados taurinos, hemos disfrutado muchísimo su valioso testimonio escrito, narrado magistralmente con su exquisita y maravillosa pluma, transportándonos al mismo lugar de los acontecimientos con esos personajes de leyenda como lo fueron "Manolete", don Álvaro Domecq, Rafael Vega de los Reyes "Gitanillo de Triana", el "Ciclón" mexicano Carlos Arruza, Pepín Martín Vázquez y Pepe Luís Vázquez, importantes figuras representativas del toreo, quienes compartieron amistad con grandes artistas del teatro, la poesía, el cante y el flamenco.

Lo felicitamos por su maravilloso escrito, magníficamente descrito con lujo de detalles, que desearía compartirlo y publicarlo, si usted me autoriza, en mi blog "Historias Taurinas".

Un fuerte abrazo con nuestro especial cariño para usted y que Dios le bendiga por ser tan fraterno amigo, además de una persona excepcional en conocimiento, prestigio y gran calidad humana.

Rafael Dupouy Gómez y familia.

(Caracas, Venezuela)

Miguel Dupouy

Muchísimas gracias don Francisco por su amable y cariñosa dedicatoria. Le agradecemos su grato e interesante relato, que disfrutamos todos en casa. Que Dios y la Virgen de los Remedios de Cártama le den mucha salud y bendiciones. Un fuerte y cariñoso abrazo.