Volviendo al dispensario médico de Cártama-pueblo villa de enjundia milenaria hoy abandonada de la mano de la administración (una obscenidad gubernamental consuetudinaria y contumazmente indecente contra la dignidad humana), que todos asumimos (sálvese el proveído de Dios) incluidos los galenos locales consabidos que, primero está la papa vengan en concepto de lo que venga --ya me entienden-- da que pensar la anteriormente referida crónica del diario Sur que firma don Fernando Torres, porque el entuerto oprobioso se remonta a décadas cuando se quiso hacer uno nuevo allá en el quinto coño del pueblo para martirio de enfermos mermados de facultades físicas, cuando se pudo (¡y puede!) en el centro del pueblo frente a la farmacia en el local que indebidamente estos compadres van a dedicar a museo, que da más votos aunque
sea una birria para museo. SÍ, HAY QUE SEGUIR HABLANDO ANTES QUE HABLEN LOS PEÑASCOS QUE SE HAN INVERTIDO, ¡Y LOS QUE LE CUELGA!, 13 AÑOS EN SACAR A LA LUZ DEL SOL PORQUE OTRA NO ALUMBRA EN CÁRTAMA, EN ABONO DE UNA HISTORIOLOGÍA QUE YA CONOCÍAMOS. ¡Lagarto, lagarto, lagarto: ¿ cuanto cuesta el parto...? ¿Cual sería el movimiento de Cártama con un centro medico en el centro equidistante del pueblo?.