El eximio cartameño, José González Marín, que se llevó, como es sabido, a América la imagen de nuestra Patrona en julio de 1.936 para evitar su quema, muestra a la prensa al regreso de dicha gira, al año y medio de su marcha, las joyas, mantos y otros obsequios de los devotos de aquel continente. González Marín señala la corona de oro y pedrerías que le regaló una familia de Caracas (Venezuela).
Igualmente, cada república visitada regalaba a la Virgen en calidad de exvoto y hermanamiento con España a través de Cártama y su Virgen, una bandera nacional, que le era entregada por el Presidente de la República de cada país visitado. Fueron 16 enseñas porque 16 fueron los países, con sus ciudades y pueblos importantes que visitó nuestra Patrona en los brazos de paje y juglar, nuestro paisano Pepe González Marín, que además, estuvo tres meses recitando por los pueblos y capitales de Andalucía allegando fondos para arreglar y restaurar la Ermita que había sido quemada durante el periodo frentepopulista, así como para comprarle a la Virgen el Trono de plata que hoy luce, que también había sido robado.
Cuando vino el trono de plata de Córdoba realizado por plateros cordobeses, fue expuesto al público en un escaparate de los almacenes Álvarez en calle Granada y Plaza de la Constitución, con este cartelito colgado.
Perdonen, mi escaner no da mejor copia hasta su arreglo: Banderas que le regalaron en iberoamérica y USA a la Virgen en los muros de la Ermita.
Las banderas orlaron los muros de la Ermita hasta la década de los años sesenta, que fueron quemadas por alguien, cuya identidad, ni los motivos, no vienen al caso ahora..