domingo, 27 de abril de 2014

A DON FERNANDO BRAVO CONEJO



Bien ocupado, ¡que buen sillón sería!


Sr. D. Fernando Bravo
Cártama                                                                              27 abril 2.014

Sr. Bravo:

              Distorsionando, una vez más, la verdad de forma sinuosa y con medias tintas, hace ya más de dos semanas que en Facebook me estableció usted una coercitiva disyuntiva, o, más bien, una presunta  amenaza solapada, en público y por escrito que, saliendo de usted y dirigida a mí (¿qué le hecho yo, sino bien desde que arribó a este pueblo hace pocos años…?) constituye una flagrante ingratitud e injusticia. Es del siguiente tenor literal:

 “Hace tiempo que le expliqué cara a cara lo que creo que pasa en Cártama  con sus temas, no me haga que lo repita aquí (por lo visto me amenaza con repetirlo lo que sugiere que me dijo a mi cara a cara, en Factbook públicamente)  porque no suelo dedicar mi tiempo a estos marujeos (¡vaya manera despectiva de tratar a  la mujer…!) e igual no le gusta a usted que lo sepan otros” La gravedad de la amenaza que entre líneas encierra este aserto, es patente.

En cuanto me vi públicamente objetivado de tal guisa, le envié un email a su correo personal, no público, hará ya dos semanas, rogándole que a la mayor brevedad  en el mismo medio (Facebook) dijera usted:

1º.-  Qué clase de temas míos son esos que usted (pavoneándose de valentón) me dijo “cara a cara”, amenazándome con repetirlos si no me atengo a sus insondables designios. ¿Qué quiere decir “hace tiempo”? Diga cuando.

2º.-   ¿A que se refiere cuando dice  “igual no le gusta a usted que lo sepan otros”?

Señor Bravo, mi capacidad para encajar calumnias de cuatro malnacidos ha tocado a su fin. Yo no tengo de nada que avergonzarme en mi andar por este perro mundo en los 83 años que tengo. Sólo he hecho bien.  Si es usted un hombre, conteste a las preguntas que antes le hago (y conteste con pruebas) en el mismo medio público en que las vertió tan temerariamente.

Dije que hace dos semanas  le pedí esto mismo por email a su correo personal y, me consta le ha llegado. Ahora, para que lo haga le doy hasta mañana tarde. A partir de ahí, actuaré de forma adecuada. Mi honra, imagen y dignidad no le permito a nadie que me las quiebre. ¿USTED CONOCE MI VIDA, SALVO QUE HAYA COMPARTIDO ALGUNAS CALUMNIAS TRAICIONANDO UNA LIMPIA AMISTAD QUE LE DI Y HASTA LE HE DEJADO PERPETUADO EN UNO DE MIS LIBROS?


Me reservo el derecho a publicar  este escrito y otros  referidos en otros medios.