miércoles, 4 de julio de 2018
PEDRO EL DESCONCERTANTE
Jamás ha existido desde que elegimos vivir en democracia un presidente del gobierno con tan exiguas fuerzas propias y sin haberse comprometido ante el Congreso con un programa serio y claro; este presidente que ha obtenido el poder mediante el abordaje llevando como pendón la bandera negra con la calavera, a más a más ha basado su acceso al poder en oscuras negociaciones antipatrias con unos aliados que, curiosamente, incumplen la Constitución diariamente y, pretenden hacer añicos la unidad de España mediante un golpe de Estado que ningún gobierno del mundo dejaría impune y, el actual presidente lo premia, siendo por ello presunto connivente tácito del incumplimientos de las leyes que él ha jurado cumplir y hacer cumplir. Hay que agradecerle que no implicara a Dios en el juramento del cargo. Sí, lo peor de lo peor, y eso que en la piel de toro abundan los réprobos.