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Me cabe la satisfacción de haber recuperado en la prensa (hemerotecas nuevamente), en 3 libros, en las redes, en infinidad de artículos publicados, conferencias, etc. la memoria en las redes de un cartameño famoso y bueno, que salvó su Patrona de la quema y, al mismo tiempo su tradición de cinco siglos, contra el que la nefasta REPÚBLICA, por tres veces atentó contra su vida con sus largos tentáculos incluso allende los mares, cuando recitaba a García Lorca, Alberti, Rosales (sus amigos que aparecen en la foto que precede) y daba a conocer a su pueblo y las letras cumbres de España. Si en Cártama no ha sido posible recuperar su memoria benéfica, es porque en este pueblo nuestro del alma, la mentira, el bulo y la especie lesiva tiene más devotos que la propia Virgen de los Remedios.
