martes, 2 de noviembre de 2021

 MI GESTIÓN PARA QUE JOSÉ  Mª PALMA REGALASE LA MUSA DEL CERTÁMEN DE RAPSODAS DE CARTAMA-

Año  2.oo1. Un día  de mayo de este año hube de pasarme por  el Ayuntamiento de Cártama, en el que gobernaban  en alternancia tres partidos: PP de Leonor García Agua, Juan Carlos Rodríguez y  Manuel Miranda.

 En las oficinas me encontré con la dinámica e inteligente concejala de cultura, Remedios Vargas,  enfrascada en las tareas de organizar el primer Certamen Internacional de Rapsodas, JOSÉ GONZÁLEZ MARÍN,  de feliz recordación  cultural que dio a Cártama y pueblos de la hoya de Málaga  prez y pátina.

 Si bien disponía la eficiente  edila de dinero suficiente (1.000.000 de pesetas) para premiar  al aedo ganador en  la lid juglaresca, se devanaba el caletre  (ella y el jurado de ilustres profesores y  literatos),   para concretar que imaginero podría esculpir aceptablemente la estatuilla  para entregar como recuerdo y consolación a todos y cada uno, de los  participante en la justa lírica.

De inmediato llamé  desde el propio despacho de Remedios Vargas  a mi amigo, el insigne escultor, José María Palma Burgos, residente entonces en Córdoba quien,  como su padre, Paco Palma Martín y hermanos Francisco y Mario, era también famoso escultor, autor por cierto, José María, del busto de José González Marín expuesto en el despacho del genial artista cartameño.

Tras presentarle por el teléfono al escultor a la concejala, ésta le contó su problema y, el amigo del alma respondió de inmediato: “Yo me encargo de eso; una “musa” que tengo diseñada al mismo fin para una institución de Madrid, va para Cártama en la cantidad que necesite  el pueblo de JOSÉ GONZALEZ MARÍN, NO  TE CUESTA UN DURO NI MI TRABAJO, NI EL MATERIAL Y, REGALO TAMBIÉN PARA EL AYUNTAMIENTO de Cártama, cuna del mejor de los artistas y amigo bueno ,  el ISBN y todos mis DERECHOS  de AUTOR. Y, CUMPLIÓ SU PROMESA.

  Por la corta edad entonces, José María Palma no pudo participar, como  su padre y  hermanos mayores,  Francisco (el remodelador de la talla  del Cristo de Mena, o de la  “buena muerte”,  patrón de los legionarios) y Mario, en la reconstrucción a partir de febrero de 1.937 de la  Ermita de la multisecular imagen y tradición de la Patrona de Cártama, Ntra. Sra. de los Remedios quemada y expoliada por las milicias socialistas.

 Tras haber salvado PEPE DONZÁLEZ MARÍN la sagrada imagen de la quema socialista, reconstruyó y pagó su Santuario y le compró un trono igual al robado por los del Frente Popular. Eso no fue óbice para el bueno de González Marín, que como “contrapartida” no tuvo empacho en salvar del campo de Concentración y a veces de muerte, a 36 socialistas que avaló corriendo inmenso riesgo su vida misma, en el cuartel  de la Aurora en Málaga cuando ya estaban  formados para partir hacia  el Campo de Concentración (Véase acta de Pleno del Ayuntamiento de Cártama de 20 febrero de 2.014: Reconocen por unanimidad cuanto aquí digo y otras virtudes de hombre bueno de nuestro  laureado artista, pero no se le restituirían el nombre que siempre llevó (JOSÉ GONZALEZ MARÍN) que siempre llevó su Teatro en Cártama porque, “en dicho Teatro cuando se ponía Cine salía también el NODO”   durante el franquismo Era un ilustre concejal de Cártama quien tal arguyo. Y esta gente, gobierna el Ayuntamiento de un pueblo con 25.000 habitantes. Y les seguiremos votando todos. Así nos va.