Esta fotografía corresponde a un acto con amigos en Coín. A su izquierda el entonces alcalde, tío de Tomás Pabón, primero por la izquierda Guillermo Álvarez Prolongo, secretario de Coín y Cártama, etc. El artista era hijo adoptivo de Coín, que le tenía, y tiene, dedicada una glorieta.
En Cártama le han quitado su nombre al Teatro que lo llevó desde su construcción en 1.942.
Y todavía los palurdos que no saben lo que es un soneto (ni siquiera un pareado), prevalidos del "carguillo de marras" y movidos por inconfesables sentimientos han sumido a Cártama en el mayor de los ridículos culturales ante todos los pueblos y lugares que se enteran de tal chafarrinada, colmo públicamente se afeó en Arroyo de la Miel en un homenaje hace algún tiempo a José González Marín y al poeta Salvador Rueda conjuntamente.
Con motivo de las próximas elecciones, el actual Ayuntamiento ganaría, y no perdería por este penoso "caso" muchos votos si restituyen su legítimo nombre al Teatro. Sería fácil explicar tal justicia. Sólo hace falta deponer rencores y un poco de inteligencia, que me consta tiene nuestro alcalde y su equipo. La terquedad no es más que un necio gasto de energía.
Si, cosa no descartable, los gobernantes de hoy no ganan laas cercanas eleccions seguro que van a ver el tanto que se apuntarían ante el pueblo, que siempre es inteligente, sería clamoroso. Al tiempo, quien lo vea.
