REMITIDO
Más que
popular podría decirse, a tenor de lo
que se oye por las calles, impopular
porque, no nos engañemos, un partido político es al pueblo lo que sea y
proyecte su cabeza de lista, su mandamás, en este caso “mamandasa”, Leonor
García Juli, quien en Cártama, políticamente está más ajada que el sombrero de fieltro de un
manijero de siega en el mes de agosto.
La verdad
es que repasando objetivamente sus luces
para la gestión pública, desde que abandonó los pleitos para dedicarse a la
política lugareña, sus actuaciones no han podido ser más onerosas para los intereses del lugar.
Salvo el
Certamen Internacional de Rapsodas, José González Marín, que por cierto no fue
idea suya, nada grato de ella queda al
recuerdo; ni del tripartito con el que
cogobernó,no elegidos por el pueblo
sino colados de rondón al mandoneo (dios, íbamos a decir mangoneo) por la
puerta falsa de una moción de censura; si algo queda en la memoria de su mandamaduría (es el palabro adecuado), se trata de cosas deplorables que no son de este momento rememorar ; tiempo habrá porque, el
entredicho, tiene tela que cortar.
Con lo que
antecede no intentamos, Dios nos libre
de ello, dar coba a ningún otro partido integrante de la Corporación Municipal
(no es nuestro estilo), ni mucho menos insinuar, sino todo lo contrario, que el
PP de Cártama no cuente con personas
cualificadas para asumir responsabilidades de gobierno, y que por tanto puedan sustituir con ventaja
sideral a la señora Leo; conste esto. Pero es que,
doña Leo a la hora de quitarse de su
vera a quien pueda hacerle sombra, se
pinta sola en sepia. Está visto y comprobado; ¡ya ven que sí!.