UN SUPONER
Desde una verosímil hipótesis,
lo primero que cada mañana, aún bostezando,
Pedro Sánchez hace, es echar una preocupada mirada a la ESPAÑA que él
gobierna, por si Dios, hubiese hecho con Ella un salvífico MILAGRO. Pero… ¡¡quia!!:
España estaba donde Pedro la ha puesto: ¡En la ruina material y moral; en quiebra
fraudulenta!
Y Dios viendo
desde el cielo el “caso”
se le escapo una lágrima
y dijo para sus adentros:
“Cuando creé palomas
no debí crear buitres”