DIÁLOGO
Hoy, quizás más que
nunca, se impone recuperar la cultura del Dialogo a todos los niveles (políticos,
institucionales sociales y, por supuesto personales.) Tiene razón la Real
Academia de la Lengua, al elegir como palabra más definitoria del año recién ido:
“Polarización”, premonitoria, salvo milagro, de desventuras (ya presentes: las
distintas guerras brutalmente letales). La inteligencia de que el buen Dios dotó al hombre a la par
que le dio su libertad de uso, no parece que le convirtiera en Rey del planeta edénico
sino, en su nota discordante, en cuya ristras de vicios vivenciales, parece
estar más feliz que en la sublime paz que fluye de Dios, sus mandamientos y
ejemplos para lo que se encarnó y, hecho Hombre, lo Crucificaron.
¡¡Y eso, precisamente eso, es lo que la humanidad
continua haciendo!!
España es elocuente ejemplo.