sábado, 30 de abril de 2016

LA VIDA ES UN MISTERIO


Corazón,  ¿qué puedes tú, solitario,
Vagando  entre la muchedumbre
Del  hoy artero y proceloso orbe
Si eres paloma a  gavilán  atado?

¿Quién puede  en tan desigual batalla
A la vacuidad  mundana no rendirse?
¿Anidas lo eterno, o lo mudable y breve?
¡Dios, sólo de tu bondad espero ayuda!

¿Del pensamiento y  razón soy obediente
O sólo me dice  el camino el  sentimiento?
 Me asusta  obedecer a mi  emoción solo
Y que ilusa y osada  se apropie del caletre.

¡Que vida tan inquieta la del mundo!
¡Que promesa tan dulce la del cielo!
La muerte…¡qué misterio tan profundo!
La nada… ¡qué terrible desconsuelo!

¡Oh Cristo, con sandalias por senderos…!,
Me dejaste preso  en Tú verbo y Tú misterio.