EVOCACIÓN DE “
Allá por los años
sesenta del pasado siglo, los humildes formatos de los programas de las
fiestas del 23 de abril en honor de
Pues bien, en dichas datas merodeaba un día por
Torremolinos un redactor del célebre semanario humorístico, “
Y miren ustedes por donde, lo que vino a caer en las manos de este mediático sabueso,
fue el programa de las fiestas abrileñas de Cártama, en el que se incluían tres artículos: uno de ellos
lírico y pretendidamente rimado, pero amétrico
y argumentalmente más cursi que una gata
con faralaes, que firmaba, Don José
Baquero Luque; otro en prosa, salió del
magin del cura párroco, don José María
Almagro y, el otro, lo firmaba el alcalde del lugar, Don José Sevilla Ortega.
Fueron presos, por los siguientes
cargos, tal constaba en el auto
mediático: “Fallamos y condenamos al vecino de Cártama…, a su cura párroco
y a su alcalde a siete días, una hora y tres minutos en
A la vista de lo anterior, si hoy existiera la “Codorniz”,
y trincara en su redacción los programas coetáneos de dichas fiestas con sus
aportaciones literarias tan abundantes
en solecismos propios de quienes ni siquiera han pisado la
miga de Doña Ciriaquita, etc, en vez de en la “Cárcel de Papel”, serían metidos sin fianza en las negras mazmorras del “Penal
de papel estraza del Puerto de Santa
María”
A decir verdad, si las trenas nacionales están nutridas de políticos mangantes, lo estarían a
rebosar si la pedantería temeraria de los analfabetos funcionales metidos a
gestores del pueblo, fuera también
delito.