A la hermética, exclusiva y excluyente directiva de la Asociación
Cultural, Abindarraez-PSOE, oportunamente, creo, LES SUGIERO:
Intentar de las Repúblicas Iberoamericanas
en estos momentos de animosidad contra España para blanquear sus respectivas y
graves circunstancias políticas y económicas, que nos repongan las banderas que
hace ochenta años regalaron a la Virgen de los Remedios cartameña que visitaba
dichos países por circunstancias aciagas en España, es una memez.
Aquellas repúblicas REGALARON (digo
regalaron para siempre) a la Virgen de los Remedios copia de sus respectivas
enseñas nacionales para que orlaran para siempre (digo, PARA SIEMPRE) los muros de su Santuario,
entonces llamado de la Hispanidad. O sea, esas banderas eran propiedad de la Virgen
para toda la vida y, si un día fueron quemadas, no fueron quienes las
regalaron, sino los cartameños, ¡¡¡que vergüenza!!!, y, por tanto, la cosa es fácil si hubiera
luces: Basta con encargar a un taller de costuras unas nuevas banderas más chiquitas y volverlas a poner en nuestra
Ermita en donde estuvieron décadas y décadas. Y, de paso, un pie objetivamente
redactado explicando el origen y causa de tal regalo a España en señal de
hermanamiento y el juglar que salvó a la Virgen y consiguió tales honores para
su pueblo.
Pero ojo: El principal obstáculo
para llevar a cabo tal acto restitutivo tan sencillo, está en la casa
consistorial de Cártama y no, en las
repúblicas que las regalaron para la historia indeleble pasada y futura. Luces,
luces es lo que se requiere y, valor para lidiar al berrendo de marras aludido.
Estáis creando un problema en vez de una solución, ilustres señores de la
directica rabindranesca pesoista.