martes, 26 de mayo de 2015

HISTORICIDAS ANALFABETOS INFULADOS


Cebrian y Felipe (tanto monta), dos antiguos falangistas que ya han guardado la chaqueta de pana... Con el segundo empezó la corrupción en España y, del primero "pa qué hablar": él mismo es la antihistoria. El segundo concibió como resorte electoralista la falsificación de la Historia  e importó, al efecto, al hispanista? Ian Gibson, entre otros. .


Durante la pasada campaña electoral, mientras  menda tomaba café en un bar próximo a casa, un fulano, al parecer socialista de nuevo cuño (NO MUNÍCIPE), arengaba de alta política a los parroquianos presentes y, aducía tan pancho el muy  iletrado: "Franco vendió el tesoro de oro de España para pagar los fusiles de su ejército, por eso tenemos que echar a Rajoy..."   Me invadió, como amante de la historia por la historia (la definida por Cicerón y Cervantes como "camino de la verdad ..., emula del tiempo, depósito de las generaciones (¡depósito de las generaciones, oigan,  a las que se les está robando flagrantemente en aras de bajandinos intereses de partidos políticos traficados por indocumentados como el de marras...!, testigo de lo pasado, ejemplo y aviso de lo presente (¡ojo...!)  , advertencia de lo porvenir... 

O sea, según digo en mi libro "Cártama histórica. El Juglar y la Virgen peregrina", desmentidora final (la historia real)  de las distorsiones interesadas que sobre el pasado se suele traficar de forma obscena y capitalizada.  

Si por ser fiel a  la Historia se le cuelga a alguien el sambenito de "franquista" para echarle encima a los fanáticos y  sectarios de lo políticamente correcto y de moda, yo soy el más forofo franquista que existe.

Sin más comentarios. No los merece.